Se han utilizado tantos eufemismos para definir desde los organismos oficiales la situación geológica de la ladera de Yesa –donde por cierto no conviene olvidar que a un centenar de familias las sacaron a la fuerza de sus vivienda y bajo el pago de indemnizaciones–, que todo aquello de movimiento imperceptible, que no tiene variación significativa o que se encuentra en equilibrio estricto queda al desnudo con cada nuevo episodio conocido.

El último capítulo del recrecimiento del embalse no deja de ser otra noticia pésima, que alimenta la incertidumbre científica y geológica y que, a su vez, desprende una idea como telón de fondo que la expresó a las claras recientemente la directora general del Agua del Ministerio de Ambiente, Dolores Pascual, que por cuestiones azarosas resulta que era la anterior presidenta de la Confederación Hidrográfica del Ebro. Pascual, una vez conocido que el cuarto modificado de la obra iba a posponer el fin de las obras hasta el año 2030 y sin que aún se supiera siquiera que hacían falta obras complementarias para asentar la ladera, lo dijo así: “No se contempla un escenario en el que Yesa no se recrezca”. Interpreten lo que quieran de sus palabras, pero teniendo en cuenta que la segunda máxima responsable del Estado deja dicho esto, tampoco caben muchas más alternativas a que es una obra que se hará a toda costa por pura obcecación.

Proyecto ya en la mesa del Ministerio

Por tal motivo, el hecho de que la Confederación Hidrográfica del Ebro haya remitido ya al Ministerio un proyecto para reforzar la seguridad de Yesa, en palabras del actual jefe de la CHE, Carlos Arrazola, que conlleva un sobrecoste de 47 millones de euros y se ejecutará durante 36 meses. Serán, según exponen, obras independientes y que se podrán ejecutar de manera simultánea a los trabajos que se realicen para ejecutar el cuarto modificado de la obra, que aún no ha sido aprobado por el Estado, lo que motiva que hoy en día estas labores están paralizadas.

"No queremos que haya ninguna duda de que la ladera es segura. Es una presa con mucha controversia"

Carlos Arrazola - Presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro

Pero, de vuelta a lo concreto de la ladera, Arrazola anunció que se tratará de obras complementarias a las que se ejecutaron de emergencia cuando se expropiaron en el año 2013 las urbanizaciones de Lasaitasuna y El Mirador. Entre obras y demoliciones constan al menos 27 millones que tuvo que pagar entonces la CHE para indemnizar a los propietarios y tirar abajo aquellas viviendas y dejar preparado un terreno que dejaba de ser habitable. Posteriormente, se habilitaron otros 25 millones para ejecutar los primeros trabajos de estabilización. Ahora se reforzarán las estructuras con muros, se construirán anclajes, túneles de drenaje y zonas de impermeabilización. 47 millones de euros más para un estribo que a día de hoy, y desde hace años, la CHE considera que no tiene movimiento significativo.

Arrazola afirma que “no queremos que no haya ninguna duda de que es segura”, lo cual no hace sino alimentar las dudas en torno a dicha infraestructura. Aún así, el presidente de la CHE solo pudo expresar un lacónico “confío” cuando se le cuestionó si estas serán las últimas obras del embalse. “Es una presa con mucha controversia. Confío en que cuando culminemos esos proyectos hayamos acabado, Ya me gustaría a mí poder certificar, pero esa es una palabra muy determinada”. 

Barkos (Geroa Bai): "Revisar el proyecto hasta las últimas consecuencias"

La senadora de Geroa Bai, Uxue Barkos, presentó el lunes una serie de preguntas parlamentarias dirigidas al Ministerio para la Transición Ecológica al objeto de conocer los detalles relativos a la seguridad en torno a la obras de recrecimiento de Yesa después de que el presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), Carlos Arrazola, haya señalado que está prevista una nueva intervención para consolidar la ladera derecha, la cual se realizaría en paralelo al cuarto modificado que afecta a los aliviaderos del embalse, según explicó Geroa Bai en una nota.

En este sentido, Barkos ha advertido de "las serias dudas y la constante incertidumbre que se ha ido generando en torno a la seguridad de esta infraestructura a lo largo de los años", por lo que ha vuelto a insistir en "la necesidad de que el Ministerio para la Transición Ecológica acometa la revisión del proyecto de recrecimiento de la presa de Yesa hasta las últimas consecuencias". "Estas obras han venido marcadas por una confusión propiciada por el ocultismo y la desinformación en torno a distintos estudios acerca de la seguridad de las obras: la extrema vaguedad e inconcreción de algunos informes que se han hecho públicos, el retraso en su publicación, las importantes contradicciones entre unos y otros, han generado mucha incertidumbre", ha criticado la senadora navarra.

Asimismo, Barkos ha afirmado que "estamos ante un nuevo escenario, ante una emergencia climática que requiere de soluciones y de protocolos que den respuesta a una situación que para nada es la de hace más de 20 años cuando se iniciaron estas obras" y ha señalado que "Naciones Unidas viene advirtiendo desde hace tiempo que el aumento significativo de precipitaciones extremas e inundaciones que provoca el cambio climático nos obliga a revisar los protocolos de seguridad de los que nos hemos dotado hasta ahora".

Por ello, la senadora de Geroa Bai solicita conocer en qué van a consistir los trabajos que se van a acometer en la ladera del embalse así como el coste de los mismos, al mismo tiempo que pregunta al Ministerio por la adaptación de los protocolos de seguridad de esta obra al cambio climático, tal y como apunta Naciones Unidas. De igual forma, Barkos espera que el presidente de la CHE pueda exponer próximamente en el Senado todos los detalles en torno a esta cuestión ya que Geroa Bai solicitó su comparecencia en la Comisión para la Transición Ecológica de la Cámara Alta. 

Pozueta (EH Bildu): "La situación es alarmante"

Igualmente, la diputada de EH Bildu Bel Pozueta ha solicitado la comparecencia en el Congreso del presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), Carlos Arrazola, "después de que haya confirmado que se destinarán 46 millones más a las obras de recrecimiento del pantano de Yesa". Pozueta quiere que Arrazola explique "la alarmante situación del proyecto" y exponga los detalles y razones sobre "los crecientes sobrecostes, el alargamiento de plazos y la falta de seguridad y viabilidad técnica que afectan al proyecto", explica la coalición.

EH Bildu ha defendido que "la seguridad del pantano de Yesa y sus alrededores es un tema de prioridad absoluta" y ha insistido en la necesidad de "paralizar cualquier obra de recrecimiento mientras no se tenga la certeza total de que no conlleva ningún peligro".