La salud no solo depende de diagnósticos, tratamientos o intervenciones clínicas. Y tampoco se concreta únicamente en los hospitales o centros de salud, sino que se relaciona de manera directa con el entornos físicos y las circunstancias socioeconómicas. Por eso, la salud comunitaria se instaura como una mirada que entiende el bienestar como un fenómeno colectivo, marcado por los contextos. Por eso, Navarra ha dado paso firme hacia un modelo de atención sanitaria más humano, participativo y centrado en los determinantes sociales de la salud a través de la presentación del documento inicial de la Estrategia de Salud Comunitaria en Atención Primaria del Departamento de Salud, que se ha desarrollado conjuntamente entre Atención Primaria y el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN) y que comenzará a implementarse a partir de septiembre, aunque en junio ya comenzarán a constituirse los equipos de apoyo y se preparará el pilotaje del plan de acción. En este plan se pondrá en valor los equipos de Atención Primaria, conformados por ocho profesionales vinculados a la gerencia de Atención Primaria y al Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra.
Esta estrategia se plantea desde tres niveles: la asistencia individual y familiar con orientación comunitaria –que se enfoca en las causas de las causas; es decir, busca ofrecer una atención contextualizada–, tal y como ha explicado Asier Calvo Álvarez, especialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Por otro lado, el segundo nivel se relaciona con el trabajo grupal con orientación comunitaria –personas con una misma situación vital o enfermedad reflexionan colectivamente sobre su proceso, mejoran sus conocimientos y adquieren más capacidades para afrontarlo– y, por último, la acción comunitaria en salud –que ya no busca un rendimiento personal, sino una mejora del bienestar de la comunidad en la que trabajan o viven–. De esta manera, se entiende que "el centro de salud no es el único centro de salud, sino que en nuestros territorios hay otros muchos agentes que generan salud", ha apuntado.
Asimismo, este nueva estrategia de salud comunitaria contará con una estructura conformada con cinco agentes: un grupo motor de profesionales de Atención Primaria, un grupo asesor con profesionales de la administración, un equipo de apoyo –con cuatro trabajadores vinculados al GAP y al Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN)–, un equipo de Atención Primaria, que se encargará de implementar las estrategias dentro de su zona básica y, finalmente, una comisión de salud comunitaria, que se centrará en labores de coordinación e implementación del plan (contará con profesionales de admisión, trabajo social, enfermería y medicina, además de expertos en pediatría y en atención a personas adultas.
Los equipos de Atención Primaria "juegan el rol fundamental" dentro de esta estrategia. Estarán conformados por profesionales de Trabajo Social, y de Enfermería y Medicina especialistas en Atención Familiar y Comunitaria. De hecho, se han creado cuatro plazas de enfermería especializada específicamente desde la gerencia de Atención Primaria para la constitución de este equipo de apoyo. Y se encargarán de funciones como el diseño y desarrollo de materiales, del plan formativo, del desarrollo de nuevos talleres para profesionales y promoverán la investigación multiprofesional con el objetivo de llegar al mayor número de la población.
El pilotaje de la estrategia tendrá lugar en cuatro distritos "con equilibrio territorial, que pertenecen a las áreas de Pamplona, Estella y Tudela y en los que hay centros urbanos y rurales". Para su elección, se ha tenido en cuenta la vulnerabilidad de la población de las zonas básica, la experiencia de los equipos de Atención Primaria trabajando en acción comunitaria y la situación global de los equipos. De esta forma, se han escogido Burlada, Villava, Huarte, Auritz/Burguete, Milagrosa, Azpilagaña, Aranguren y Sarriguren dentro del área de Pamplona; Estella, Lodosa, San Adrián y Viana, en el área de Estella y Cascante, Buñuel, Tudela Este y Tudela Oeste en el área de Tudela. "Estos 16 equipos de Atención Primaria recibirán un apoyo intensivo por parte del binomio de los equipos de apoyo. Será un apoyo proactivo, metodológico y técnico y recibirán una formación específica: introducción a la salud comunitaria, educación para la salud grupal, acción comunitaria y acción individual", han explicado Sonia Rico, jefa de la Sección de Cuidados Asistenciales y Atención Domiciliaria y Judit Lapieza, enfermera.
Plan de acción
Entre septiembre y junio de 2025, se comenzará la primera fase de este plan, que tiene como objetivo la constitución de los equipos de apoyo y la preparación de pilotaje. Después, una vez acabada este establecimiento inicial, hasta septiembre del año 2026 tendrá lugar el pilotaje en las cuatro áreas mencionadas. Después, entre septiembre y diciembre de 2026, se hará una primera evaluación del pilotaje, donde se observarán las fortalezas y debilidades y qué asuntos pueden mejorar. Finalmente, de cara a 2027 se producirá la extensión hacia el resto de zonas básicas de salud. El presupuesto que se ha establecido para el primer año de este proyecto asciende a 338.354,63 euros.
"Un éxito"
En su intervención, Fernando Domínguez, consejero de Salud, ha afirmado estar "convencido" de que la implementación de la estrategia "será un éxito" y ha explicado que la salud comunitaria en atención primaria "se fundamenta en un enfoque integral que reconoce la influencia de los determinantes sociales en la salud y promueve la participación activa de la comunidad en la identificación y resolución de sus necesidades". "Este modelo busca fortalecer la equidad y mejorar la calidad de vida de las personas, abordando no sólo la enfermedad sino también las condiciones que la generan", ha dicho, tras añadir que "participación comunitaria es involucrar a la población en la identificación de problemas de salud y en la toma de decisiones".
Según ha subrayado, "poner el foco en los determinantes sociales de la salud y reconocer que factores como la educación el empleo, el entorno físico y social, entre otros, influyen significativamente en las salud de las personas puede ayudarnos en nuestro cometido".
En este sentido, ha apostado por "defender la atención integral y continua, ofrecer cuidados que aborden las necesidades físicas emocionales y sociales de los individuos a lo largo del tiempo, trabajar con un modelo de atención que va más allá del tratamiento de la enfermedad, poniendo el foco en las condiciones que la generan, y promoviendo la participación activa de la comunidad".
Por su parte, Martínez ha considerado que "hay que mirar a largo" plazo, con estrategias "que nos permitan de verdad superar los problemas a los que nos dedicamos todos los días con el pico y pala, y esta yo creo que puede ser esa estrategia".
"Llevamos 30 años diciendo que tenemos que girar de la asistencia a la prevención y a la promoción, pero no acabamos de hacerlo y esta estrategia pone el foco ahí, pone el foco en la comunidad y no en las consultas, los centros, los hospitales", ha indicado, tras añadir que "no por poner más tecnología o más consultorios o más profesionales, que son muy importantes, que son necesarios, vamos a conseguir" mejorar el nivel de salud de la población. "Es una estrategia que tiene interés porque aúna los esfuerzos de la atención primaria con salud pública", ha apuntado Martínez, tras remarcar que "es una estrategia que mira al futuro, contando con los distintos testamentos profesionales y contando con los conocimientos de las distintas disciplinas".