Varios testigos, usuarios de la A-12, declararon a la Policía Foral que el conductor causante del accidente mortal de Zizur Mayor circulaba “a mucha velocidad” momentos antes del siniestro. Uno de estos testigos hizo constar que “un Audi Q7 de color gris nos adelantó a gran velocidad, sobre unos 200 km/h. Tras adelantarnos por el carril izquierdo, al ir a reincorporarse al carril derecho, el Audi Q7 de color gris se fue hasta la salida 5, casi saliéndose de la vía, teniendo que contra volantear para quedarse en el carril derecho sentido Pamplona. Por la velocidad a la que iba lo perdimos de vista muy rápido”, señaló este conductor, para añadir que “uno o dos minutos, nos encontramos el accidente después de un cambio de rasante”.
Otro testigo señaló que “iban circulando solos por la calzada” a la altura del kilómetro 6 de la autovía en sentido a Pamplona y que “un vehículo de color claro nos adelantó a mucha velocidad, a entre 160 y 180 km/h, y nos llevamos un gran susto”. Este conductor afirmó que “vio cómo se alejaba y antes de llegar al cambio de rasante observó unas luces que pudieran ser de frenada. Tras superar el cambio de rasante, lo perdió de vista. Al aproximarse al kilómetro 5, vieron vehículos parados en la calzada de sentido Pamplona y entonces se percataron del accidente en la calzada de sentido La Rioja”.