La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Navarra ha confirmado una condena de doce meses de prisión a un conductor temerario, vecino de Cascante y de origen marroquí, que circuló de noche por la N-121-C, a la altura del hospital Reina Sofía de Tudela, sin luces, tomó en sentido contrario una rotonda e incluso adelantó a la patrulla de la Guardia Civil por el arcén en el momento en el que se pusieron a su altura para darle el alto.

El acusado había sido condenado en el Juzgado de lo Penal número 4 y recurrió dicha condena, en la que además perdía durante dos años y medio el carnet de conducir. Sin embargo, la Audiencia desestima sus alegaciones y confirma la conducción temeraria.

Los hechos sucedieron sobre las 00.50 horas del 7 de julio de 2021 cuando el procesado conducía por el kilómetro 2,5, en término de Tudela, de la N-121-C sin el alumbrado preceptivo. Por ello fue apercibido por un vehículo de la Guardia Civil para que detuviera su marcha y el acusado respondió huyendo rápidamente del lugar. Lo hizo circulando en sentido contrario en una rotonda y obligó a un vehículo articulado a frenar bruscamente para evitar la colisión.

Del arcén a la invasión del carril contrario

Asimismo, el encausado adelantó a los agentes por el arcén cuando se colocaron a su altura e invadió en ocasiones el carril de sentido contrario.

El juez de lo Penal basó su condena, entre otros argumentos, en la declaración del copiloto del vehículo y único testigo directo y objetivo de los hechos. Fue identificado de inmediato por los agentes, puesto que el conductor y acusado huyó del coche hacia un campo de olivos y no pudo ser interceptado.

La Audiencia dice que "es cierto que el testigo, en el momento de los hechos, se encontraba en estado de embriaguez, pero en modo alguno existen datos que permitan considerar que dicho estado hubiera podido impedirle o dificultarle la identificación del conductor del vehículo y confundirlo con otra persona, lo que no se desprende de lo manifestado por los agentes intervinientes ni por el propio testigo que, en todo momento, afirmó estar seguro de que el acusado era el conductor".