La Fiscalía navarra reclamará en el juicio una condena de 20 años de prisión por asesinato para José María Uruñuela Ansó, de 43 años, después de que acuchillara hasta la muerte a su propia esposa, Sara Pina Yeregui, de 38, en enero de 2022 en el piso en el que convivían. La acusación particular que ejerce la familia de la víctima pide por si parte 25 años de cárcel mientras que la acusación popular que ejerce el Gobierno de Navarra exige 23 años, al no contemplar la agravante de género que sí estima la acusación particular.
El Ministerio Público considera que los hechos se desencadenaron entre las 22.00 horas del día 7 de enero de 2022 y las 4.00 horas del día 8 de enero de 2022, cuando el acusado y la víctima se encontraban en el domicilio que compartían en Tudela. Así, aprovechando que ésta se encontraba dormida, el acusado le asestó al menos cinco puñaladas mortales en la zona del abdomen y hemitórax, causándole heridas que acabaron con la vida de Sara.
Para ello, el acusado se valió de un cuchillo de 34 centímetros, de los cuales 21,5 cm eran de hoja, al tiempo que, con una almohada cubría la cabeza de la víctima con la intención de facilitar más todavía su objetivo de matarla. Por la profundidad y afectación orgánica de las heridas causadas, la Fiscalía resalta que se deduce un alto grado de violencia ejercido en su causación.
El Ministerio Público aprecia en la conducta del acusado la circunstancia atenuante (que rebaja la pena) de consumo de tóxicos con afectación mental y explica que, en el momento de los hechos, presentaba trastornos mentales y del comportamiento, debidos
al consumo de drogas y sustancias psicotrópicas sobre un trastorno mixto de la personalidad. También al acusado se le aplica la agravante de parentesco, por estar casado con la víctima en el momento de los hechos
