La titular del juzgado de instrucción número 9 de Murcia, en funciones de guardia, ha abierto diligencias previas por posible homicidio imprudente tras el fallecimiento en la madrugada de este domingo de una menor que recibió una descarga eléctrica mientras jugaba en una cama elástica en la pedanía murciana de Alquerías.
El Tribunal Superior de Justicia de Murcia ha informado de que, según el auto de apertura de diligencias, los hechos presentan características que hacen presumir la posible existencia de un delito de homicidio imprudente, y lesiones imprudentes.
El suceso ocurrió la pasada medianoche en el recinto ferial instalado en Alquerías por las fiestas patronales cuando la pequeña, de dos años, origen marroquí y que residía junto a su familia en otra población, recibió una descarga eléctrica al tocar, al parecer, la valla metálica que protegía la instalación de camas elásticas.
Entre las diligencias acordadas, la juez dispone que personal del ayuntamiento colabore con el equipo de policía judicial en el desmontaje y análisis de las instalaciones eléctricas gestionadas por la empresa suministradora de electricidad, como cuadros, tomas de tierra y componentes de iluminación, entre otras.
Tres días de luto oficial
El Ayuntamiento de Murcia, que ha expresado el pésame por lo ocurrido y declarado tres días de luto oficial desde la tarde de este domingo hasta el miércoles, ha informado a EFE de que la feria se instaló en una parcela privada, situada en las cercanías del centro de salud de Alquerías, y los responsables de las atracciones fueron los encargados de solicitar la preceptiva licencia a Iberdrola.
La niña falleció alrededor de una hora después de sufrir la descarga, tras practicarle sin éxito maniobras de reanimación, y otros tres menores, una niña de ocho años y dos niños de 11 y 12, resultaron heridos.
Tras ser asistidos en el lugar del accidente por los servicios sanitarios, los tres heridos fueron trasladados por sus propios medios al hospital.
La policía judicial de la Guardia Civil precintó la atracción en la mañana de este domingo y tomó declaración a trabajadores y testigos para determinar las circunstancias en las que se produjo el suceso.
Según el Ayuntamiento de Murcia, los tres menores heridos son vecinos de Alquerías, se encuentran ya en sus domicilios y hoy han recibido la visita del alcalde pedáneo, José Luis Marín, para interesarse por su estado y expresar el apoyo de la corporación municipal.
Alquerías, de unos 6.000 habitantes, es una pedanía situada a unos ocho kilómetros de la capital regional, limítrofe al municipio de Beniel y celebraba estos días sus fiestas en honor a San Juan Bautista, que han sido suspendidas en señal de duelo.