Interceptados 1.000 kilos de hachís en Irurtzun en una operación internacional contra el tráfico de drogas
La Policía Nacional española y francesa dan por desarticulada una banda que distribuía estupefacientes a gran escala
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Agentes de la Policía Nacionaly de la Police Nationale de han culminado con éxito la operación Zeus, una investigación conjunta que ha permitido la desarticulación de una red criminal internacional dedicada al tráfico de drogas a gran escala en España y Francia, en la que se han decomisado 1.000 kilos de hachís en Irurtzun. En total, han sido detenidas 17 personas y se ha decretado prisión para 15.
La investigación comenzó el pasado mes de marzo, cuando agentes de la Oficina Antidroga (OFAST) de Burdeos interceptaron un camión español que iba cargado con 35 fardos de hachís, que sumaban más de 1.400 kilos de esta sustancia. Este hallazgo permitió a los investigadores franceses detectar la existencia de una red criminal formada por ciudadanos franceses que introducían grandes cantidades de estupefacientes desde España.
A raíz de estos hechos, se estableció una investigación conjunta entre la Policía Nacional francesa y la española, con el objetivo de desmantelar por completo esta estructura criminal trasfronteriza dedicada al tráfico de droga a gran escala.
Centro de operaciones en Teruel
Las pesquisas apuntaron a una organización criminal que tendría su centro de operaciones en una localidad de Aragón, concretamente en Azaila (Teruel), donde localizaron el inmueble exacto utilizado por la red criminal, una vivienda que servía como principal punto de acopio y distribución de la droga en territorio español.
La investigación fue avanzando y permitió identificar a numerosos miembros de la organización criminal, así como el rol específico que cada uno desempeñaba. Del mismo modo, los agentes lograron identificar los vehículos utilizados habitualmente pro la red para realizar la carga y transporte del estupefaciente.
Al tener conocimiento de un inminente e importante traslado de droga desde Azaila hacia Francia, los investigadores establecieron dispositivos de control permanente en la zona, que permitieron detectar el 21 de junio un convoy de vehículos franceses dispuesto a salir de la localidad turolense. El morador de esta vivienda llegó incluso a bloquear la calle con su tractor para impedir que se pudiera observar desde el exterior cómo introducían los fardos de hachís en una de las furgonetas.
A partir de este momento, los agentes comprobaron que el convoy realizaba labores de lanzadera, circulando varios kilómetros por delante de la furgoneta que transportaba la droga, con el objetivo de detectar y evitar posibles controles policiales. Finalmente, el convoy fue interceptado en las proximidades de la localidad francesa de Larenz, donde se intervinieron 15 fardos de hachís (400 kilos) y detuvieron a cuatro personas.
Paralelamente las autoridades francesas detenían a otros seis miembros de la organización en Chennevières-sur-Marne donde ocultaban el grueso de esta droga para después distribuirla a diferentes zonas del país vecino. Se intervinieron 17 fardos (650 kilos), 24 kilos de cocaína, más de 16.000 euros en efectivo, seis vehículos (dos de ellos sustraídos) y tres relojes de una conocida marca de lujo. Además, se incautaron de numeroso material de dotación policial francés, que los delincuentes utilizaban para hacerse pasar por policías y robar estas sustancias a otras organizaciones criminales, práctica conocida como “vuelcos.
Cinco detenidos en Navarra
Dos días más tarde, el 23 de junio, nuevamente en la localidad de Azaila, los agentes detectaron un nuevo cargamento utilizando el mismo modus operandi de vehículos lanzadera. En esta ocasión, el convoy fue interceptado en Irurtzun, donde detuvieron a otras cinco personas y se incautaron 23 fardos de hachís, con un peso total de 1.000 kilos.
Al día siguiente se llevaron a cabo varios registros en La Puebla de Híjar y Azaila (Teruel). En esta última, donde reside y fue detenido el principal miembro de la organización, los agentes localizaron un escondite habilitado para ocultar los fardos de hachís. Este espacio se encontraba disimulado tras unas estanterías, simulando ser una pared más de la vivienda. Durante estos registros se intervinieron una pistola semiautomática y más de 8.000 euros en metálico.
Con estas detenciones y la colaboración entre las fuerzas y cuerpos de seguridad francesa y española, se ha conseguido desmantelar una importante organización criminal internacional especializada en el tráfico de cocaína y hachís.