Tres hombres de entre 25 y 35 años fueron detenidos en la calle Juan de Labrit de Pamplona tras intimidar a viandantes y robar con violencia un teléfono móvil, en una operación policial contra bandas juveniles que acabó con su ingreso en prisión.
La Policía Foral ha abierto diligencias este fin de semana a 27 personas por la comisión de distintos delitos y además se han atendido 41 accidentes de tráfico, que se saldaron con un fallecido y tres heridos. En materia de Seguridad Ciudadana se han producido 24 detenidos, 13 de ellos por delitos contra el patrimonio. Siete de los arrestos por robos se produjeron en Pamplona, dos en Tudela, tres en Huarte y otra en Estella-Lizarra.
El suceso más importante se produjo en la Calle Juan de Labrit de Pamplona, donde fueron detenidos tres hombres de origen marroquí, de entre 25 y 35 años. Son residentes en el edificio okupado en la antigua Ikastola Jaso y en la zona de las huertas de Aranzadi y estuvieron implicados la semana pasada tras haber quemado un colchón en el recinto mencionado de Etxabakoitz y haber cortado posteriormente con una botella a uno de los inquilinos. Las detenciones de este fin de semana las efectuaron agentes de paisano dentro del dispositivo de control de bandas juveniles con Policía Municipal de Pamplona. Los arrestados increpaban e intimidaban al resto viandantes en la madrugada del jueves al viernes, y consiguieron robar a la fuerza a un hombre un teléfono móvil de alta gama, después del intento de sustracción de una cadena a otro ciudadano. Las diligencias fueron remitidas al correspondiente juzgado de guardia donde se decretaría el ingreso en prisión de los detenidos.
Además, otros cinco varones eran detenidos por delitos relacionados con el ámbito de la violencia contra la mujer en tres localidades de la Comunidad Foral.
Por requisitorias judiciales se detuvo a tres personas. En Corella, era detenido un varón, por pesar sobre él un señalamiento nacional de detención e ingreso en prisión que se hizo efectivo por la patrulla interviniente. En Barañáin, agentes de Policía Local detenían y ponían a disposición de Policía Foral, a una mujer por recaer sobre ella una orden de detención de un Juzgado de Pamplona. Y, finalmente, en Pamplona, se detenía a una persona buscada por otro juzgado de Pamplona, en el transcurso de una identificación preventiva a un grupo de jóvenes, por parte de agentes de seguridad ciudadana.