La divulgación de una conversación privada en la que el presidente del Parlamento luso, el socialista Augusto Santos Silva, expresaba críticas al comportamiento de otros partidos ha causado polémica en Portugal, donde le han exigido que se retracte.

Las imágenes fueron grabadas por el canal de la Asamblea de la República el pasado martes, tras la sesión de bienvenida al presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y recogen una conversación con el primer ministro, el también socialista António Costa, y el presidente portugués, el conservador Marcelo Rebelo de Sousa.

Santos Silva comentaba lo ocurrido durante la sesión, en la que el partido ultraderechista Chega protagonizó un escrache contra Lula da Silva e Iniciativa Liberal (IL) solo acudió con un diputado, en protesta por la presencia del jefe de Estado brasileño.

"Hoy hicieron una bellísima campaña electoral para un futuro cargo de vicepresidente (...) Pero ahí ya no es falta de educación, es falta de integridad política", puede leerse en los subtítulos que acompañan al vídeo, en el que algunas partes de la conversación son imperceptibles.

Y continúa: "Lo que Iniciativa Liberal decidió hacer no es nada. Porque hay siempre alguien que lo hace peor".

Después de que varios medios divulgasen las imágenes al día siguiente de la sesión, Santos Silva publicó un comunicado en el que lamentó que se hiciese pública una "conversación informal y privada" y dijo que no se había autorizado su grabación.

Además, clarificó sus palabras y aseguró que nunca acusó a IL de falta de "integridad política", sino de "madurez", pero que el término es imperceptible por la calidad del sonido.

También especificó que cuando habló del cargo de vicepresidente del Parlamento no se refería a los liberales.

La ultraderechista Chega es el otro partido que aspiró a un cargo de vicepresidente y no lo consiguió.

Las críticas de las formaciones no tardaron en llegar y el líder liberal, Rui Rocha, acusó al presidente del Parlamento de tener un "comportamiento indigno" y exigió una petición de disculpas pública.

Por su parte, el diputado de Chega Pedro Pinto alegó que la víctima no es Santos Silva por ver filtrada una conversación privada: "Hubo dos víctimas. Fueron 20 diputados elegidos democráticamente", espetó.

El presidente del Parlamento se ha negado a pedir disculpas a los partidos y ha anunciado que investigará lo ocurrido con el vídeo, que supone una "flagrante violación" de derechos.

Santos Silva ha tenido varios encontronazos en el Parlamento con Chega ("Basta", en portugués), el último tras el escrache que el partido hizo a Lula da Silva.

"Basta de insultos, basta de avergonzar a las instituciones, basta de avergonzar el nombre de Portugal", dijo entonces, visiblemente irritado.

Santos Silva anunció el miércoles que vetará a los diputados de Chega de los viajes oficiales al extranjero mientras no se pueda garantizar que actúen con respeto.