Dos residentes de la región autónoma de Guangxi Zhuang, en el sur de China, exhumaron varias tumbas y robaron los huesos de los familiares difuntos de un funcionario con el objetivo de chantajearlo a cambio de un favor, informa el portal chino Global Times. El plan comenzó a gestarse en 2018, después de que un maestro de Feng Shui llamado Wang intentara sobornar al funcionario para que lo ayudara a resolver un trámite. Pero el empleado público, llamado Wei, se negó. Posteriormente Wang, con ayuda de un cómplice, extrajo del cementerio los huesos de los abuelos y suegros de Wei, y luego los escondió en una cueva.

Los hombres confiaban en que cuando el funcionario descubriera la exhumación, recurriría a ellos para recuperar los restos de sus familiares. Sin embargo, el plan fracasó cuando el cómplice de Wang confesó a la Policía lo que habían hecho, y ambos fueron arrestados. Los policías encontraron los huesos y los devolvieron a su lugar en el cementerio.