Después de ignorar varias resoluciones del Gobierno foral y del Tribunal Administrativo de Navarra (TAN), el Ayuntamiento de Pamplona ha tenido que dar su brazo a torcer y finalmente ha concedido la licencia a Laba Elkartea que de forma reiterada se había negado a dar pese a lo dispuesto en la ordenanza municipal.
El concejal delegado de Seguridad Ciudadana Javier Labairu ha firmado la autorización, poniendo fin a una larga polémica en la que se ha puesto de manifiesto la parcialidad de los anteriores responsables del equipo de Gobierno de Navarra Suma y su firme intención, hasta que les ha sido posible, de impedir que Laba dispusiera de la terraza que le correspondía en la Plaza del Castillo.
La rectificación del Ayuntamiento se formalizó el miércoles 13 de septiembre, durante una discreta reunión a la que asistieron los representantes de Laba, el concejal Labairu, el director del área, Patxi Fernández, y un responsable del equipo jurídico municipal.
Un expediente tan surrealista como este no podía acabar de forma normal y aún tuvo un último giro de guión insospechado, cuando el área de Seguridad Ciudadana, en plena reunión, llegó a plantear una opción alternativa a Laba, proponiendo una ubicación alternativa que reducía el acceso al portal del vecindario del número dos sólo a través de los porches, y que seguía permitiendo que bar Windsor siguiera ocupando parte del ancho de esa fachada, sin contar con la autorización de la propiedad, lo que fue rechazado de plano 48 horas después.
El desenlace deja en una muy delicada situación a Labairu, que tras ser reprobado hace unos días por el asunto de las barras en los Sanfermines de 2022 –que según una reciente resolución del TAN eran ilegales– ahora debe dar marcha atrás en este asunto, obligado sin duda por las consecuencias que podrían derivarse de su continuada negativa a acatar los dictámenes existentes.
Un tortuoso proceso
Han hecho falta cuatro resoluciones del TAN, dos del Gobierno de Navarra y otra más del Defensor del Pueblo para que el Ayuntamiento cambiara de parecer, en lo que supone una nuevo giro de rumbo que la alcaldesa Ibarrola tiene que adoptar en poco tiempo de la gestión heredada de Enrique Maya.
El empecinamiento pese a que la ordenanza es muy clara al respecto y la continuada desobediencia de las resoluciones del TAN generaron intensos debates en la pasada legislatura, con una mayoría municipal criticando a Labairu, que siempre se escudó en los equipos jurídicos municipales para justificar el trato discriminatorio que aplicaba a Laba, que como local de degustación de café tenía derecho a instalar su terraza.
El Gobierno foral actúa a instancias del TAN
Que el Ayuntamiento se negara a cumplir las resoluciones del TAN llevó a la apertura de un procedimiento poco habitual (la ejecución subsidiaria) del ordenamiento jurídico, que contempla la intervención de la Administración –en este caso el Ejecutivo foral– para dar cumplimiento forzoso a una determinada obligación (la resolución del TAN que el Ayuntamiento se negaba a acatar).
En mayo, el Gobierno de Navarra aprobó un acuerdo que incluía la subrrogación automática de las competencias municipales en la materia.
Ajeno a todo ello, hasta el último momento el Ayuntamiento ha hecho todo lo posible para que Laba siguiera sin terraza y se ha resistido a que el asunto saliera de su ámbito competencial, como señaló en las alegaciones presentadas el 19 de julio donde defendió “que corresponde a los técnicos municipales analizar la legalidad del proyecto”.
El detonante para la rectificación del Ayuntamiento ha sido una Orden Foral del nuevo consejero de Cohesión Territorial, Óscar Chivite, firmada el pasado 1 de septiembre, donde confirma la resolución de la Dirección General de Administración Local, con fecha de 1 de agosto, a favor de Laba.
En ella se reconoce el derecho del local a disponer de la licencia y desestima el recurso presentado por el bar Windsor, el establecimiento que ha estado ocupando el espacio de terraza que correspondería a Laba Elkartea.
En sus alegaciones, el Windsor consideró lo sucedido una invasión de las competencias municipales y pidió anular la resolución del director general a favor de Laba al entender que afectaba a su negocio.
El consejero desestima los argumentos del Windsor y recuerda que la interposición de cualquier recurso “no suspenderá la ejecución del acto impugnado”.
La nueva Orden Foral agota la vía administrativa y menciona que sólo ante la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia se podría interponer un hipotético recurso (el plazo es de dos meses), que en ningún caso anularía la decisión del TAN.
Cronología
7 de enero de 2022. Laba, una asociación, que pretende promover el uso del euskera mediante actividades culturales, abrió su local, situado en el número 2 de la Plaza del Castillo, y pidió la licencia de terraza
25 de febrero de 2022. El concejal delegado de Seguridad Ciudadana, Javier Labairu, denegó el permiso.
10 de octubre de 2022. El TAN estima el recurso presentado por Laba contra la decisión del Ayuntamiento.
11 de octubre de 2022. El Defensor del Pueblo, mediante una resolución, recomienda al Ayuntamiento que cumpla la ordenanza y conceda la licencia.
24 de enero de 2023. El TAN ordena al Ayuntamiento que en el plazo de un mes otorgue el permiso de terraza.
7 de marzo de 2023. Laba informa al TAN de que el Ayuntamiento no ha cumplido la resolución.
24 de marzo de 2023. El TAN da cuenta al Gobierno foral del incidente de ejecución.
2 de mayo de 2023. Laba solicita a la Dirección General que acuerde la intervención sustitutiva.
10 de mayo de 2023. El Gobierno foral acuerda realizar las actuaciones necesarias para la ejecución subsidiaria de la resolución del TAN que el Ayuntamiento se negaba a cumplir.
19 de julio de 2023. El Ayuntamiento defiende que la decisión sobre la terraza corresponde a los técnicos municipales.
1 de agosto de 2023. Mediante resolución, el Director General de Administración Local reconoce el derecho de Laba a la licencia de terraza.
10 de agosto de 2023. Recurso del bar Windsor contra dicha resolución.
1 de septiembre de 2023. El consejero Óscar Chivite desestima el recurso del Windsor y emite una Orden Foral.
13 de septiembre de 2023. El concejal Labairu se reúne con Laba para comunicar que les concederá el permiso. Les ofrece una alternativa, que pasaría por compartir el espacio de terraza con el Windsor.
15 de septiembre de 2023. Laba rechaza la propuesta de Labairu y exige la ordenanza que le corresponde.
