El abad del Monasterio de La Oliva (Navarra), Isaac Totorika, ha fallecido esta madrugada en Pamplona a los 59 años. El monje cisterciense vizcaíno era desde diciembre de 2009 abad, después de haber estado varios años en el Monasterio de Zenarruza, donde llegó a ser superior de la comunidad. Su funeral este sábado en La Oliva, donde será enterrado y próximamente se celebrará una Eucaristía en su recuerdo en Ermua, su localidad natal.

Totorika entró en La Oliva en marzo de 1993 y cinco meses después tomó el hábito de novicio. En 1994 fue a Zenarruza, donde realizó la profesión simple el 15 de agosto de 1995 y la profesión solemne el 31 de julio de 1998. En diciembre de 2007 fue ordenado sacerdote y desde enero de 2009 hasta su marcha a La Oliva fue superior de Zenarruza.

Ante su nombra miento en La Oliva, Isaac manifestaba sentirse “muy ilusionado”, confiando “fortalecer un monasterio con tantos años de solera”, como señala el obituario hecho público por la Diócesis de Bilbao y recogido por la web Vida Nueva. En aquellos momentos reconocía que el tomar esa decisión le había hecho crecer espiritualmente: “He pegado un tirón en mi relación con el Señor. Me llegaban rumores de que los hermanos de La Oliva pensaban en mí para ser su abad. No le veía mucho sentido, teniendo en cuenta mis capacidades limitadas y, sobre todo, viendo que mi salida iba a suponer un duro golpe para Zenarruza. Me resistía a asumir humanamente tal posibilidad. Yo me atreví a retarle al Señor y, al igual que en los relatos bíblicos, le pedí un pequeño signo. Tras un cuidadoso discernimiento espiritual, llegué al capítulo dispuesto a asumir lo que de él saliera”.

En esa celebración Isaac reconocía que llegaba a La Oliva con alegría: “Doy gracias al Señor porque el Monasterio me ha ayudado a crecer como persona y como creyente”.