Las creaciones artísticas de LKN, muralista famoso en la ciudad por sus carteles osasunistas, no pasan por un buen momento. Al poco de colocarlas, las arrancan.

Le pasó hace tres semanas, cuando un agente de la Policía Foral retiró sin orden previa un mural que en los aledaños del Parlamento ilustraba un beso entre la presidenta Chivite y la portavoz de EH Bildu, Bakartxo Ruiz, en el contexto del acuerdo presupuestario. Y ayer, el cartel con el que precisamente quería responder a ese episodio de la accidentada retirada, apenas duró un par de horas. A primera hora de la mañana, LKN colocó un dibujo en una caja de distribución de la Plaza del Castillo -frente a la comisaría de la Policía Foral- titulado El beso foral y que representaba a dos agentes del cuerpo autonómico besándose.

Una respuesta irónica al episodio de la retirada del cartel de Chivite y Ruiz, y que la propia Policía Foral aplaudió en su cuenta de Twitter. “El amor no tiene cura, pero es la única cura para todos los males”, transcribió la policía en Twitter, parafraseando a Leonard Cohen, en un mensaje en el que recordaban que “se acerca la Navidad, el bicho sigue ahí” y agradecían expresamente a LKN la nota de color en un tiempo tan gris. “Gracias, LKN, eskerrik asko”.

Poco duró el cartel, porque apenas amaneció lo volvieron a quitar. Pero en esta ocasión no fue la Policía Foral, sino alguna persona que decidió hacerlo trizas.

Ni siquiera el propio autor, consultado por este periódico, se explica el porqué de esta reacción. “Hoy la verdad es que siento rabia, pensaba que iba a aguantar más”, reflexiona el artista urbano, alguno de cuyos carteles osasunistas lleva meses en lugares emblemáticos de la ciudad. LKN desconoce quién lo ha quitado y por qué, pero sabe que ha tenido que ser de día y le extraña que nadie haya visto nada ni haya sacado alguna foto, porque “el que lo ha quitado lo ha hecho expresamente, vamos, se ha ensañado”, apunta. LKN reconoce que al principio le ha dado “un poco de bajón”, porque no entiende quién tiene el afán de arrancar un cartel así, que hace una lectura irónica sobre acontecimientos de la actualidad navarra.

Sea por una cosa o por otra, LKN no volverá a las calles hasta dentro de un mes o dos. Es decir, no va a volver a repetir una performance similar. Va a tomarse diciembre para descansar y sacar adelante un proyecto de página web. Pero tiene claro que “en enero o febrero” volverá a los murales. “Después de darme el bajón me ha venido una idea a la cabeza, una idea para hacer algo grande y potente, que no se pueda arrancar fácil”.

El artista urbano LKN había vuelto a sorprender con el mural colocado junto a un buzón de Correos ubicado en la Plaza del Castillo de Pamplona, un lugar próximo a Diputación y a la Comisaría del Cuerpo autonómico, ubicada en el nº2 de la citada plaza.

Como ya mencionamos, dicho mural era la respuesta de LKN a la retirada por parte de agentes forales de la obra que colocó el pasado 11 de noviembre frente al Parlamento de Navarra en una caja de registro.Parlamento de Navarra

Se trataba de un dibujo en el que su autor ilustra el acuerdo en aquel momento aún sin oficializar entre el Gobierno foral y EH Bildu para los Presupuestos de 2021 forales con un beso entre la presidenta de Navarra, María Chivite, y la portavoz de EH Bildu, Bakartxo Ruiz.María ChiviteBakartxo Ruiz

El mural recordaba a la icónica imagen que se encuentra en el Muro de Berlín en el que salen besándose dos hombres, uno es el líder de la Unión Soviética, Leonid Brezhnev, y el otro, el presidente de la República Democrática de Alemania, Erich Honecker.

Del anterior mural incluso se hizo eco el vicepresidente primero del Gobierno foral, Javier Remírez, quien manifestó su "respeto absoluto" a una iniciativa que enmarcó dentro de "la libertad de expresión". Sin embargo, el dibujo no duró mucho. Consultado entonces por este periódico, el artista relató la versión de los hechos y asumió que todo lo ocurrido le había sorprendido un poco. "Pretendía, simplemente, reflejar la situación política actual, con lo que parece que es un acuerdo que va para adelante. Yo solo quería ilustrarlo, ni criticarlo ni nada", explicó. Recibió la llamada del jefe de la Policía Foral para relatarle lo ocurrido y presentarle sus disculpas. "Me ha trasladado que ha sido la actuación por su cuenta de un policía, que se ha tratado de un error, porque la Policía Foral respeta el arte y la libertad de expresión", dijo.