La presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, planteó ayer una desescalada que sea “prudente, progresiva, lenta y segura” de las restricciones frente a la covid-19 en Navarra. Junto a ello, anunció que espera que en junio se pueda poner en marcha un nuevo paquete de ayudas al sector hostelero, reconociendo que “es el que más está sufriendo las restricciones”.
LEA TAMBIÉN Preguntas y respuestas jurídicas tras el estado de alarma
En una entrevista en la Cadena Ser, la jefa del Ejecutivo foral no se mostró “excesivamente preocupada” por el final del estado de alarma el 9 de mayo y señaló por ejemplo que el TSJN ya ratificó sin esta figura el cierre perimetral de la Comunidad Foral, como ha venido ratificando “la práctica totalidad de las medidas que hemos ido poniendo”. “Esperemos que las medidas que llevaremos el domingo o el lunes también sean ratificadas”, señaló, considerando que sin estado de alarma las comunidades autónomas tienen “los suficientes instrumentos como para manejar nuestras propias restricciones”. “Las comunidades pueden pedir el estado de alarma solamente para su comunidad, otra cosa es que lo quieran utilizar. En Navarra no hemos tenido esos problemas con los tribunales, pero existe ese abanico de posibilidades legales y jurídicas”, agregó.
Chivite expresó que el Gobierno foral prevé mantener el toque de queda durante mayo, aunque este mismo mes ya se prevé ir abriendo gradualmente el interior de la hostelería y argumentó que “ya no estamos en estado de riesgo extremo, estamos en otro momento”, por lo que planteó una desescalada “prudente, progresiva, lenta y segura”. Explicó que el Gobierno mantiene un “proceso de diálogo” con el sector hostelero y que se está fijando un calendario progresivo de los interiores ya a partir de mayo con limitaciones de aforo.
la hostelería, más perjudicada Chivite reconoció que la hostelería es “el sector que más está sufriendo las restricciones, pero hemos puesto ayudas encima de la mesa por 20 millones el año pasado y 18 millones este año, y nos queda un paquete de ayudas que viene del Gobierno de España -un fondo de 68 millones- al que también podrán acceder”. La presidenta del Gobierno confió que en junio pueda haber nuevas ayudas para la hostelería.
Además, Chivite incidió en el efecto que supondrá la suspensión de los Sanfermines tanto para la hostelería como para el “ánimo” de la ciudadanía. “Los Sanfermines forman parte de nuestra identidad, todos los navarros los sentimos como propios. El Ayuntamiento de Pamplona ha hecho una actuación muy responsable con una decisión muy complicada”, indicó, para desear que el año que viene sí pueda haber Sanfermines.
Sobre la vacunación, señaló que en este proceso el Gobierno ha apostado “por la cercanía”. “Estamos yendo a los municipios y trabajamos en colaboración con las entidades locales, que están ayudando mucho cediendo espacios. La población lo esta percibiendo como algo positivo y todo está funcionando bien”, expuso.
Por otro lado, se mostró partidaria de la liberalización de patentes para la producción de las vacunas, pero afirmó que “tampoco debemos fiarlo todo a esto, porque hay otros problemas” relacionados. “Se trata de fabrica y no es tan fácil, hay problemas en el suministro de componentes. La fabricación de vacunas no es tan sencilla”, apuntó.
La presidenta del Gobierno de Navarra se mostró ayer esperanzada en que se aprueben las nuevas medidas y consideró que las comunidades autónomas tienen “los suficientes instrumentos” para manejar sus propias restricciones.
Toque de queda. Chivite adelantó que está previsto que el toque de queda se mantenga durante mayo.
Hostelería. La presidenta de Navarra habló de que se prevé abrir gradualmente interiores.
