Fue la noche del 7 de julio de 2016 cuando sucedió. Un hecho que quedará escrito en la trágica memoria de la ciudad. El día grande de Sanfermines terminó manchada para siempre por una violación cruel y en manada a una joven madrileña de 18 años en un portal de la calle Paulino Caballero. Un suceso que ha marcado un punto de inflexión decisivo en el enjuiciamiento de delitos sexuales de este país.

Cinco años después de este suceso por el que fueron condenados los cinco integrantes de la Manada a penas de entre 15 y 20 años de prisión, y tres años después de que miles de personas se manifestaran en las calles tras conocerse que la sentencia no contempló los hechos como violación, el Gobierno aprobó el martes la ley del 'solo sí es sí' que deberá pasar por el trámite parlamentario. Esta nueva ley, que puede llegar a la cámara baja en septiembre, supone un cambio legal en la forma de juzgar los delitos sexuales, en los que el silencio o la pasividad ya no significará consentimiento".

Con motivo de la aprobación de este texto, la ministra de Igualdad Irene Montero recordó ayer también a Nagore Laffagea ministra de Igualdad Irene Montero recordó ayer también a Nagore Laffage, cuando se cumplieron 13 años de su asesinato, y "a tantas mujeres víctimas de violencia sexual".

GALERÍA | Nagore Laffage, en el recuerdo 13 años después de su asesinato

UN LARGO PERIPLO JUDICIAL

Después de casi cinco años de idas y venidas en los tribunales, en diciembre de 2020 el caso de La Manada pasó a ser historia de los capítulos judiciales de Navarra con la confirmación por parte del Tribunal Supremo de la condena a 3 años y 3 meses de prisión por haberle grabado a la víctima de los Sanfermines sin consentimiento varios vídeos y fotos mientras la agredían sexualmente. Una condena que se aplicó a dos de ellos y que se trataba del último recurso pendiente en la causa.