Los nuevos positivos en coronavirus en Navarra han quedado por segundo día consecutivo por debajo de los 400 casos diarios esta última jornada, en la que se ha notificado un fallecimiento y cuatro ingresos. En concreto, la Comunidad Foral detectó este miércoles 351 nuevos casos positivos de Covid-19, tras realizar 1.749 pruebas, que sitúan la tasa de positividad en el 20,1%. Es la misma cantidad registrada el día anterior, 351 contagios, según las últimas actualizaciones.
Actualmente, según los datos facilitados por el Gobierno de Navarra, permanecen hospitalizadas 130 personas, 17 de ella en cuidados intensivos.
Respecto a la vacunación, tras la administración ayer de 1.555 dosis, el total de vacunas inoculadas asciende a 1.379.166 y el de personas con la pauta completa a 551.565.
Parece que la sexta ola de coronavirus va quedando atrás en una semana en la que se han levantado el grueso de las restricciones para frenar los contagios, si bien los expertos piden prudencia: "En Sanfermines, ¿Qué quieres, una cornada de toro o una cornada de coronavirus?", dijo este martes con ironía y muy gráficamente el catedrático de Microbiología de la Universidad de Navarra, Ignacio López Goñi, en su intervención en la jornada organizada por la Cámara de Comptos sobre las consecuencias de la covid-19.
Las olas son normales en este tipo de pandemias, reconoció, tras indicar también que las propias pandemias son habituales y cíclicas en la historia de la humanidad, de forma que antes de esta "muchos esperábamos que fuera de gripe, pero nos ha adelantado por la derecha un coronavirus", y después de esta "sabemos que volverá a ocurrir, pero no cuándo".
Por el momento, sigue el descenso continuado de contagios. Este miércoles se registraron más de 200 casos menos que los detectados el pasado 9 de febrero (584 casos) y casi un tercio de los registrados hace 14 días (el 2 de febrero hubo 1.029 contagios). En lo que va de semana los casos han bajado un 41% en comparación con el mismo periodo de la semana anterior.
En esta última jornada, por zonas básicas de salud, el barrio pamplonés de San Juan encabezaría el listado diario con 17 casos. Le siguen el barrio de la Rochapea con 16, Sarriguren con 13, Barañáin con 12, Burlada y Tudela Oeste con 11.
La mejora sostenida en los datos de ocupación hospitalaria, ligada a la evolución positiva de la situación epidemiológica, están permitiendo una progresiva recuperación de la normalidad en la actividad quirúrgica y de consultas en los hospitales de la Comunidad Foral, así como una reducción del espacio destinado a pacientes que precisan ingreso por COVID-19.
Asimismo, el descenso en las cifras de incidencia de esta enfermedad ha permitido retomar desde principios de este mes la actividad del equipo de Hospitalización a Domicilio para las zonas básicas de salud del norte de Navarra; una modalidad de hospitalización que, tras su reactivación en noviembre, se ha mantenido activa desde entonces en el Área de Estella. En cualquier caso, pese a la evolución favorable de los datos, el sistema sanitario sigue monitorizando la situación y manteniendo activa su capacidad de respuesta ante posibles variaciones en la evolución epidemiológica.
En este momento, cuando hay hospitalizadas en Navarra 130 personas (17 en la UCI), el espacio destinado a pacientes COVID en el HUN comprende la unidad de la 6ª General, media unidad de la 5ª General, un equipo de Hospitalización domiciliaria y 14 puestos de pacientes críticos, después de haber llegado a suponer en esta última ola las unidades sexta, quinta y cuarta del hospital B del HUN (129 camas disponibles), hasta cuatro equipos de Hospitalización Domiciliaria (48 camas disponibles) y ampliar los puestos de críticos disponibles con cuatro más habilitados en los boxes Unidad de Cirugía Mayor Ambulatoria del hospital A del HUN (46 camas disponibles). Caber recordar que, en el mayor momento de ocupación de esta onda epidémica, se alcanzaron en el conjunto de los hospitales de la comunidad los 281 pacientes ingresados (el 24 de enero) y los 39 en las unidades de intensivos (el 17 de enero).
En lo que respecta a la actividad quirúrgica, en este momento se ha recuperado la normalidad en la programación que se había visto alterada por el impacto en la hospitalización debido al COVID-19 y a otros virus respiratorios propios de estas fechas, así como por la elevada afectación causada por la pandemia entre los profesionales sanitarios. En conjunto, desde el 13 de diciembre hasta el 11 de febrero, se han aplazado un total de 215 sesiones quirúrgicas de las 1.478 previstas, lo que supone un 14,5% del total. Se ha preservado, en todo momento, la actividad quirúrgica oncológica y urgente y se recuperó actividad en aquella cirugía menor sin necesidad de ingreso hospitalario.
La recuperación de la actividad quirúrgica se viene produciendo progresivamente desde la última semana de enero y alcanza esta semana la plena normalidad, en espera de retomar asimismo el Plan de Lista de Espera de Traumatología a partir de la que viene.
Al igual que en olas previas y, debido a la afectación de enfermos en tratamientos con terapias de reemplazo renal, ha sido preciso habilitar sala específica de diálisis para enfermos con COVID-19 en tratamiento hemodializador que, por el momento, sigue activa.
En cuanto a la actividad de Hospitalización a Domicilio, se ha retomado este servicio para las zonas básicas de Lesaka, Leitza, Ultzama, Irurtzun, Etxarri Aranatz, Altsasu / Alsasua, Elizondo, Doneztebe / Santesteban, Auritz / Burguete, Agoitz / Aoiz, Zaraitzu / Salazar, Sangüesa / Zangoza e Isaba / Izaba, que engloba, como es habitual, un equipo de hospitalización domiciliaria.
Por otro lado, en cuanto a la atención especializada en el Hospital García Orcoyen de Estella-Lizarra, en el Servicio de Rehabilitación se está preparando actividad de tardes para atender a pacientes postquirúrgicos y, en Radiología, se está haciendo actividad extraordinaria para reducir una lista de espera que, a nivel general, está disminuyendo. La hospitalización a domicilio está plenamente activa. Además, tras su reactivación en el mes de noviembre, se ha mantenido plenamente activa la labor de la hospitalización domiciliaria.
A su vez, de acuerdo al convenio para la atención sanitaria firmado entre Navarra y La Rioja, que ha sido actualizado, los y las pacientes de la Zona Básica de Viana se derivan a la comunidad limítrofe. En ese sentido, en 2021 se realizaron 778 derivaciones (una media de 65 mensuales), mientras que el mes pasado, enero de 2022, se produjeron 49.
En cuanto al Hospital Reina Sofía de Tudela, la afectación de la sexta ola implicó a las necesidades de ingreso tanto en la planta de hospitalización como en la UCI del centro. Así, se amplió el espacio dedicado a pacientes críticos, destinando cuatro camas de la sala de despertar de endoscopias a la posible atención de pacientes sin patología COVID, mientras que las siete camas de la unidad de intensivos se dedicaron en exclusiva a pacientes COVID. En la planta de hospitalización COVID se fue ampliando el número de camas destinadas a estos pacientes conforme aumentaba la presión asistencial. La disminución de la presión asistencial ha posibilitado revertir esta ampliación desde el pasado 2 de febrero y unificar la atención a todos los pacientes de intensivos en el espacio de la UCI. La realización de endoscopias no se vio afectada por la utilización de parte de su espacio, como tampoco lo ha estado durante toda la sexta ola la actividad habitual quirúrgica o de consultas del centro, que se ha podido desarrollar con normalidad, salvo en casos puntuales por suspensiones concretas debidas a positivos en profesionales o pacientes quirúrgicos.
Por otro lado, según datos del Servicio de Profesionales del Hospital Universitario de Navarra, se denegaron o suspendieron entre los meses de diciembre y enero un total de 854 jornadas de vacaciones o permisos por necesidades de servicio, al no poder ser sustituidos sus solicitantes por falta de personal en las listas de contratación. Esta cifra supone aproximadamente un 0,75% del total de las jornadas de vacaciones y permisos concedidos en el mismo período, algo más de 113.000.
Como se recordará, con objeto de hacer frente al incremento en la ocupación hospitalaria debida al fuerte aumento de la incidencia durante la sexta ola, a principios de enero se dictó una instrucción de la gerencia del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea que ampliaba hasta el 31 de marzo de 2022 el plazo para el disfrute de las vacaciones y permisos correspondientes a 2021, que estuvieran pendientes de disfrutar y no pudieran ser autorizadas antes del 31 de enero, plazo hasta el que habitualmente se extiende la concesión de las vacaciones.