moscú - Rusia celebró ayer elecciones regionales y locales empañadas por las mayores protestas opositoras de los últimos años después de que las autoridades electorales impidieran a 57 candidatos de la oposición extraparlamentaria competir por escaños en la asamblea legislativa (Duma) de Moscú. En la capital rusa, dos horas antes del cierre de los colegios, la participación era del 17,2%. Los resultados no se conocerán hasta mañana.

En lo que se conoce como “día único de votación” en Rusia, 56 millones de votantes estaban llamados a acudir a las urnas en elecciones de distinto nivel en 85 regiones. Sin embargo, toda la atención estaba puesta en la capital rusa, donde la oposición, tras quedar fuera de juego debido a la decisión de la comisión electoral, intentó evitar que los representantes del partido del presidente Vladímir Putin, Rusia Unida (RU) ocupasen los 45 escaños que se renuevan en la Duma de Moscú.

Por estos escaños competían 225 candidatos de nueve partidos. Solo 20 diputados actuales participaban en las elecciones. Con cinco candidatos de promedio por escaño podía parecer que los votantes tenían cierta elección. Pero entre los candidatos no figuraban 57 de la oposición parlamentaria, como el exdiputado de la Duma del Estado Dmitri Gudkov o Ilya Yashin y Liubov Sobol, ambos del equipo de Alexéi Navalni, el opositor más conocido de Rusia en el exterior. Solo el liberal Serguéi Mitrojin consiguió registrarse, tras acudir a los tribunales. Los demás no tuvieron la misma suerte.

manipulación La comisión electoral de Moscú alegó para no inscribir a la oposición extraparlamentaria que sus candidatos habían incluido “almas muertas” y decenas de miles de nombres de personas inexistentes en la recogida de firmas que exige la ley. La oposición aseguró por contra que los funcionarios manipularon los datos al transcribirlos. Tal fue la indignación entre rusos y oposición que las protestas convocadas en respuesta en las calles moscovitas se convirtieron en las mayores en el país desde 2012.

Las autoridades, que no autorizaron la mayoría de las marchas, respondieron con mano dura y practicaron registros domiciliarios y detenciones preventivas a opositores para descabezar las protestas. - D.N.