La menor caída de la recaudación pública -que baja un 9,5% sobre lo previsto, y no un 20% como se dijo en mayo- y la buena calificación crediticia de Navarra, labrada a partir de 2015, van a aliviar a la Hacienda Foral de cara al próximo año de pandemia, ejercicio clave en el que además deberá renegociarse la cantidad de dinero que hay que pagar al Estado por las competencias no transferidas. De hecho, en un comunicado hecho público el último día del año, el departamento de Elma Saiz detalló que la cantidad de dinero que el departamento debe destinar a pagar el Convenio Económico ya supone el 52% del total. La consejería de Elma Saiz, que cuenta para este 2021 con 1.080 millones, reservará 560 millones, una cifra un 4% menor que en 2019. Será la última antes de que se fije la nueva aportación del año base del quinquenio que, precisamente, se está negociando ahora mismo entre Navarra y el Estado, y que se suma a las que Hacienda sigue haciendo para ahorrar mediante la renegociación de los intereses de la deuda, y que propiciará un alivio de 5 millones en 2021.

No por ser lo normal, la cifra que año a año hay que pagar al Estado por el Convenio deja de llamar la atención. Más de la mitad del Presupuesto se dedica a sufragar todas las competencias no transferidas por el Estado, al que también se abona, en base al peso de la economía navarra y no de su población, una parte de la deuda del Estado y otros fondos de los que la Comunidad Foral no se beneficia directamente. De hecho, según Comptos, el 28,7% de la aportación al Estado se destina a pagar intereses de la deuda del Estado, y que Navarra no contribuye a engordar. Una de las razones que sirven para desmontar los discursos antiforalistas que siguen pregonando que el autogobierno es una herramienta insolidaria.

Pero, en cualquier caso, la cifra que en 2021 se pagará al Estado seguro que no será la misma que la que se proyecte para 2022, para cuando tendría que estar fijada la aportación del año base del quinquenio bajo nuevos criterios. Y, además, teniendo en cuenta tres aspectos clave que condicionarán lo que se paga anualmente: la transferencia de la sanidad penitenciaria, la gestión del SMI y Tráfico.

La pandemia lo ha parado todo, pero las tres están encima de la mesa. De todas ellas, la que mayor impacto tendrá sobre el Convenio será la asunción de la competencia de Tráfico para la Policía Foral. Esto conllevará que la labor que actualmente desempeña un contingente de alrededor de 180 agentes de la Guardia Civil de Tráfico pasará a tener que desempeñarse por otros tantos agentes del cuerpo autonómico, con el trasvase económico que eso supondrá del Convenio a los presupuestos del departamento de Interior.

De Hacienda también depende la cantidad que se paga por intereses de deuda y préstamos propios de Navarra. En 2021, las arcas forales ahorrarán 5 millones de euros gracias a que “se refinanciarán a bajo coste operaciones que se concertaron a mayores tipos de interés”, tal y como asegura Saiz en la nota. Es algo que la Hacienda hace con normalidad desde 2015, cuando el departamento por aquel entonces regido por Mikel Aranburu le dio la vuelta como un calcetín a las arcas forales. De presentar un riesgo de insolvencia señalado por Comptos en 2014 (último año de Gobierno de UPN), Navarra pasó a obtener la mejor calificación crediticia del mercado, dos escalones por encima de la del propio Estado. Esa confianza financiera hace que hoy las entidades concedan préstamos a mejores tipos, préstamos que permiten refinanciar otros y propician ahorro.

Una muestra más que evidencia el buen estado de las cuentas navarras, que pese a los estragos económicos de la pandemia ha logrado amortiguar la caída en la recaudación. La capacidad para concertar deuda a buen precio en un momento en el que se necesitarán todas las vías de ingresos, sumada a la relativa buena capacidad de los ingresos propios -que han caído un 9,5% sobre lo previsto, y no en un 20% como se dijo en mayo-, son argumentos para combatir las llamadas apocalípticas de la derecha, cuyas llamadas apocalípticas no tienen de momento reflejo en la realidad.

560

El departamento de Elma Saiz deberá destinar en 2021 hasta 560 millones para pagar las competencias no transferidas por el Estado a través del Convenio Económico. Supone el 52% del presupuesto total que maneja la Hacienda.

5

La buena calificación crediticia de Navarra, labrada a partir de 2015 y que está por encima de la del propio Estado, permite seguir ahorrando millones a las arcas forales. Serán 5 durante el año 2021.

“Hemos conseguido ahorrar 5 millones renegociando préstamos a menor interés”

Consejera de Hacienda