- Podemos tiene que recuperar la esencia y volver a la calle. Sin caer en la melancolía, "porque ya no estamos en 2015", pero con la vista puesta en volver a los orígenes que hicieron de la formación morada una herramienta de cambio en todo el Estado. Es la propuesta que ha puesto encima de la mesa Begoña Alfaro, la primera inscrita de Podemos en dar un paso adelante en la carrera para suceder a Eduardo Santos -actual consejero de Políticas Migratorias y Justicia- el frente de la secretaría general de la federación navarra.

Alfaro, natural de Carcastillo pero afincada en Pamplona, es una abogada de 38 años conocida por haber participado activamente en la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH). Lleva en Podemos cerca de tres años, y ha sido una de las asesoras técnicas del partido, que a su juicio tiene que "reiniciar" el proyecto después de una "época de conflictos", de la que hay que "olvidar y aprender" para "mirar al futuro". Una clara referencia a las convulsiones internas que sufrió el partido durante la legislatura pasada, y que terminó con el proyecto prácticamente dinamitado por una disputa entre dos facciones: la oficialista, con Santos a la cabeza y que terminó imponiéndose; y la escisión liderada por Laura Pérez, Orain Bai, enfrentada a la dirección del partido al máximo nivel y que acabó con todas sus caras visibles fuera del proyecto.

Todo eso tiene que quedar atrás, dijo Alfaro. "Ahora más que nunca se necesita un proyecto fuerte que no se pierda en peleas absurdas", comentó. Alfaro hizo una presentación rápida y quiso guardarse algunas claves para los próximos días, cuando dijo que presentará a su equipo, compuesto por gente "de la calle" y "militantes de larga trayectoria". Pero sí que dijo que quiere un Podemos "renovado", capaz de generar ilusión, que no se acomode en las instituciones, más participativo, que esté bien conectado con los movimientos sociales, libre de "ambiciones personales" y que sea capaz de aglutinar todas las sensibilidades.

A partir de ahí, no cabe "caer en la melancolía". Podemos no tiene el aire nuevo de 2015, y ahora la apuesta tiene que seguir siendo participar en las instituciones. "Venimos de la calle, pero la calle tiene un límite, porque es en las instituciones donde se hacen las leyes", reflexionó, para desear que "la entrada en las instituciones no debe significar nunca olvidar la esencia". En ese sentido, dijo que su Podemos será leal a la actual fórmula de Gobierno en Navarra, donde Podemos tiene que servir para "inclinar la balanza" hacia la izquierda. Y, con respecto a alguna de las importantes asignaturas pendientes, habló de la implantación territorial, muy escasa en el partido. "Los territorios no han estado todo lo cuidados que debían haber estado, y eso lo tenemos que recuperar". Con eso espera Alfaro suceder a Santos, con el que dijo que la relación personal es "buena" y quien está al tanto de la candidatura de la abogada. "Entiendo que su papel debe ser garantizar la neutralidad en la celebración de las primarias", zanjó. Ahora queda por ver los próximos pasos de quienes también aspiren a liderar Podemos Navarra.

Abogada. Begoña Alfaro García es natural de Carcastillo, pero está afincada en Pamplona. Tiene 38 años y es abogada. Vinculada a los movimientos sociales, ha colaborado con la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH).

Trayectoria. Alfaro no es una militante de primera hora. Lleva en Podemos "dos o tres años". En 2015 fue candidata de IU y Batzarre al Congreso. La relación con el partido morado ha sido también la de ser asesora técnica.

Alfaro cree que Podemos tiene que seguir profundizando en las instituciones pero sin perder de vista la calle.