El Gobierno de Navarra ha realizado hoy un homenaje a las víctimas del terrorismo y ha ratificado su apuesta por la convivencia y la cultura de la no violencia. Miembros del Ejecutivo foral y representantes de todas las formaciones políticas, menos Navarra Suma, han participado en una ofrenda floral en la plaza de Baluarte con motivo del aniversario de los atentados del 11-M y del Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo.

El acto ha contado con participación de la AVT, representada por su delegado en Navarra, Vicente Pigueiras. No así de Anvite, la asociación de víctimas vinculada a UPN, que ha organizado un acto posterior diferenciado. EH Bildu ha estado representada por su parlamentario foral, Maiorga Ramirez, recientemente expulsado de Eusko Alkartasuna precisamente por sus discrepancias con la dirección del partido en cuanto al encaje de EA en la coalición con la izquierda abertzale.

El Gobierno de Navarra participa en el acto del Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo

El Gobierno de Navarra participa en el acto del Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo

El manifiesto aprobado

En el acto se ha leído el manifiesto aprobado el pasado miércoles por el Gobierno de Navarra, y que UPN ha criticado por "tibio". El documento, muy similar al aprobado el pasado octubre con motivo del 10º aniversario del final de ETA manifiesta que "la violencia terrorista, practicada durante décadas por ETA y otras organizaciones terroristas como el GAL, las vinculadas a la extrema derecha, la extrema izquierda o al yihadismo, además de ser injusta e ilegítima, ha supuesto una violación máxima de los derechos humanos constituyendo una grave amenaza a la democracia y a la convivencia".

El Gobierno aboga así por "continuar desde las instituciones apoyando y mostrando solidaridad con las víctimas del terrorismo, trabajando con ellas y con las asociaciones y entidades que las representan, en hacer efectivos sus derechos a la verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición".

El documento no menciona expresamente a la izquierda abertzale, pero sí le emplaza implícitamente a hacer "una reflexión ética integral". "Dado que Navarra ha sufrido durante muchos años y de manera especialmente intensa el terrorismo de ETA y aun valorando los pasos positivos que se vienen produciendo para el reconocimiento de esta realidad, hoy todavía es absolutamente necesario que aquellos que ejercieron la violencia o que pudieron darle cobertura social y política hagan pública una reflexión ética integral" recoge el manifiesto.

En su cuarto punto, el documento institucional "rechazar cualquier acción que violente la dignidad y la memoria de las víctimas del terrorismo y sus familias", y aboga por "desarrollar, frente a la cultura de la violencia, una estrategia integral que favorezca el dialogo entre diferentes, la Paz, la Convivencia y el respeto a los Derechos Humanos".

Finalmente, el Gobierno de Navarra se compromete a "promover que las nuevas generaciones conozcan el horror del terrorismo, fomentando la empatía con las víctimas, en el marco de los diferentes programas educativos puestos ya en marcha, como Escuelas con Memoria por la Paz y la Convivencia, De la mano/Eskutik, y las Unidades Didácticas introducidas en el currículum educativo navarro".