Cerca de doscientos simpatizantes han respaldado este martes la puesta en marcha de la plataforma política de Sergio Sayas y Carlos García Adanero. Entre ellos algunos ex altos cargos de Yolanda Barcina en el Gobierno de Navarra y en el Ayuntamiento de Pamplona, que acudieron a una presentación pública de lo que empieza a coger forma de escisión de UPN. La sala elegida en el Hotel Tres Reyes quedó pequeña y cerca de medio centenar de personas se tuvo que quedar fuera del acto, según afirmaron los organizadores.

Muestra de la expectación que ha generado la Plataforma Navarra, nombre por ahora provisional pero que ya resulta reconocido en una parte de la derecha, crítica con la gestión de Javier Esparza al frente de UPN. Ni Sayas ni Adanero citaron ayer el presidente de su antiguo partido, pero sus palabras tenían un destinatario claro y directo. "Esta es la alternativa que Navarra necesita para evitar más años de Chivite, Barkos y Bildu en el Gobierno de Navarra. Una alternativa que trata de dar la espalda a la desmotivación y a la inercia", enfatizó Sayas.

Había gran expectación por conocer la capacidad de movilización de los dos diputados, que hasta ahora habían aparecido públicamente en solitario. Y aunque el acto de ayer no sirve por sí mismo para valorar la fuerza que puede tener su nueva apuesta política, la satisfacción era evidente en su promotores. Visto lo visto, hay argumentos para seguir explorando esta nueva vía.

El nuevo proyecto no es todavía un partido político, pero se le asemeja bastante. Por los discurso, por su objetivo -cambiar el Gobierno- y por los apoyos que exhibió ayer. En su mayoría vinculados al ala derecha de UPN y entre ellos algunos ex altos cargos de Yolanda Barcina.

Allí se dejaron ver el exconsejero Luis Zarraluqui, consejero de Fomento entre 2012 y 2015; los concejales de Pamplona, también con Barcina al frente del Ayuntamiento, Paz Prieto e Ignacio Polo; o su asesor personal en la presidencia del Gobierno, Javier Ortigosa. Este último fue además uno de los responsables de la campaña electoral de Javier Esparza en 2015. Algunos además ya respaldaron a Sayas cuando rivalizó por la presidencia de UPN en las primarias de 2020. La ex alcaldesa de Estella, Begoña Ganuza también estuvo presente en el acto.

Críticas a Sánchez

De momento la plataforma no se constituye como partido ni tiene claras cuáles pueden ser sus alianzas. Algo que en gran medida dependerá de lo que haga UPN, que todavía no ha aclarado si concurrirá en solitario o con el PP a las próximas elecciones. Pero sí tiene definido un discurso coherente con lo que Sayas y Adanero vienen defendiendo en el Congreso durante toda la legislatura.

La receta es clara. Críticas a Sánchez -y a Chivite- por sus pactos con EH Bildu y reproches velados a Esparza por la "desmotivación", la "inercia", la "desilusión" y la "complacencia" en la que se encuentra perdida hoy la derecha navarra. "No vamos a pedir perdón ni a pedir permiso por pensar como pensamos", señaló Sayas, que aseguró que aspiran a ocupar "el espacio que han dejado libre los que han confundido pactar con mendigar". "Los partidos no pueden ser estructuras creadas al servicio de una persona", defendió. Era otro dardo directo a Esparza.

No fue muy diferente la puesta en escena de Adanero, que mostró a Sánchez como responsable de todos los males. "Aquí o se está a favor del sanchismo o en contra del sanchismo. A nosotros nos echaron de UPN por estar en contra, así que cada uno saque sus conclusiones", señaló el diputado, que subrayó que el objetivo debe ser "vencerle en las próximas elecciones". "No podemos darlo todo por perdido, así no vamos a ningún lado", argumentó Adanero, que pidió a sus simpatizantes que salgan a la calle "a convencer a los ciudadanos de que podemos ganar porque somos más". La nueva plataforma política ya está en marcha.

Refugio para desencantados

Entre el centenar largo de personas que ayer se dieron cita en el Hotel Tres Reyes había un poco de todo. En su mayoría amigos y conocidos de los dos diputados, como el concejal de Berriozar, Dani Cuesta; el árbitro, Eduardo Prieto; o el ex dirigente del PPN, Jaime Zuza. Pero también algunos referentes de la derecha, como Pachi Mendiburu, uno de los promotores de las manifestaciones la pasada legislatura contra el Gobierno de Barkos. También destacadas figuras del barcinismo, representado por antiguos altos cargos como Luis Zarraluqui, Joaquín Ortigosa, Mónica Domenech, Paz Prieto e Ignacio Polo. Así como históricos dirigentes UPN, como el expresidente de la Federación Navarra de Fútbol, José Luis Díez, o el exconcejal Miguel Ángel Ruíz Langarica. Una representación limitada en el conjunto de la representación histórica de UPN, pero que también es significativa. El acto de ayer es la prueba de que hay un espacio electora a la derecha de UPN. Queda saber quién lo ocupa y cómo es de grande.