BILBAO. Agentes del Servicio de Investigación Criminal de la Ertzaintza en Gipuzkoa, SICTG, apoyados por la Oficina Territorial de Inteligencia del mismo Territorio y personal de las Comisarías de Oria y Hernani, han desarrollado durante los dos últimos meses una investigación denominada 'Lazar', dirigida por el Juzgado de Instrucción número 2 de Eibar.

El operativo iba destinado a la detección, identificación y neutralización de un grupo criminal dedicado a la comisión sistemática de robos con fuerza en empresas de Gipuzkoa, principalmente, y que se ha saldado con seis arrestos y la identificación del séptimo integrante.

La Ertzaintza les atribuye 31 robos con fuerza a empresas, a las que accedían tras la realización de butrones en la mayor parte de los casos, para seguidamente atacar las cajas fuertes existentes en su interior, previa inutilización de los sistemas de alarma.

Los investigadores atribuyen al grupo esa serie de asaltos a industrias de diferente índole ubicadas en localidades guipuzcoanas como Idiazabal, Zaldibia, Oiartzun, Errenteria, Elgoibar, Asteasu, Ibarra, Tolosa, Zestoa, entre otras, y de otros lugares como Zamudio y Mallabia en Bizkaia. y Agurain en Alava.

Las investigaciones practicadas permitieron la identificación de sus componentes, todos ellos varones originarios de países del este de Europa, así cómo la localización de tres vehículos utilizados por el grupo. Estos hombres se encontraban residiendo, desde su llegada procedentes de la provincia de Alicante, en diferentes puntos de San Sebastián, especialmente del barrio de Amara.

Así, se pudo conocer que, previamente a su desplazamiento a la Comunidad Autónoma Vasca dos de los miembros del grupo estaban siendo investigados a su vez por la Policía Judicial de la Guardia Civil - UOPJ - de Alicante y Murcia por hechos similares cometidos en diferentes lugares de la costa mediterránea.

Las vigilancias y seguimientos realizados por la Ertzaintza sobre el grupo en cuestión permitieron establecer la existencia de pequeños 'zulos' utilizados por el grupo para la ocultación de diversos tipos herramientas y efectos, (mazas, hachas, cortafríos, palanquetas, amoladoras, y discos abrasivos) utilizados en la comisión de los robos.

Según ha indicado el Departamento de Seguridad, estos escondrijos, localizados por los investigadores, apoyados por agentes adscritos a la Unidad de Desactivación de Explosivos -UDE- y de la Unidad Canina de la Ertzaintza, se ubicaban en varios puntos de una zona boscosa del barrio de Sorabilla de la localidad de Andoain, en Gipuzkoa, lugar al que acudían los delincuentes antes y después de la comisión de los asaltos con el fin de pertrecharse para los mismos.

En dicho lugar fueron asimismo localizados tres terminales de telefonía que habían sido sustraídos la madrugada del día 22 de noviembre pasado del interior de una empresa sita en el Polígono Goitondo de la localidad de Mallabia.

Tras la localización de estos efectos se diseñó el pertinente dispositivo para la detención de los integrantes del grupo. El mismo se desarrolló la madrugada del pasado viernes en la localidad de Andoain, donde agentes del SICTG, con la colaboración de la Unidad de Intervención de la Ertzaintza y personal de la Unidad de Brigada Móvil, detuvieron a seis de sus componentes cuando viajaban a bordo de dos vehículos de las marcas Hyundai y Audi.

Los vehículos interceptados se disponían a acceder a la N-1 procedentes del barrio de Sorabilla, a donde se habían desplazado tras cometer un robo horas antes en una empresa ubicada en la localidad alavesa de Agurain.

En los vehículos, los cuales han sido intervenidos, fueron localizados cinco equipos transmisores-receptores portátiles, herramientas, dinero, así como ropa y calzado para cambiarse con el fin de modificar su aspecto a la hora de cometer los robos.

Dos de los walkie-talkie, uno en cada vehículo, estaban operativos e interconectados entre sí en el momento de la actuación policial, aunque los arrestados no tuvieron opción de hacer uso de los mismos debido a la rapidez con la que se desarrolló la intervención.

IDENTIDADES FALSAS A los detenidos les fueron ocupados asimismo diferentes documentos de identidad falsos. Además sobre uno de ellos pesaba una orden de detención de un Juzgado de lo Penal de San Sebastián, y otro de ellos tenía prohibida su entrada en el país hasta el año 2025 a raíz de la comisión de diferentes delitos.

Durante la jornada del mismo viernes fueron registradas dos viviendas en la capital donostiarra. La Ertzaintza está tratando de localizar al séptimo componente del grupo, ya identificado, con el fin de proceder a su detención.

Los seis detenidos tienen entre 36 y 52 años de edad, cuatro de ellos son serbios, uno albanés y el último esloveno. Cuatro de los arrestados cuentan con numerosos antecedentes por delitos contra la propiedad.

Tras la puesta a disposición judicial de los detenidos la mañana del domingo, la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Eibar decretó la puesta en libertad provisional de todos ellos, previa retirada de sus pasaportes y con la obligación de personarse quincenalmente en sede judicial, ya que la Fiscalía no había solicitado la prisión provisional de ninguno de los detenidos.