Los investigadores de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Navarra tiraron de olfato policial para resolver los robos por alunizaje que tenían entre manos y que se habían registrado casi de forma consecutiva en Pamplona durante el pasados mes de diciembre: revisaron los coches que estaban siendo robados en Navarra en las últimas semanas y comprobaron que la mayoría de ellos eran turismos de la marca Opel, principalmente modelos Astra, Vectra y Kadett fabricados en la década de los 90. Gracias a ello obtuvieron un nombre: el de un experto en la sustracción de estos vehículos, con numerosos antecedentes por robos de automóviles similares de las mismas características, que resultó ser uno de los aluniceros que estaba detrás de los asaltos a comercios que estaban siendo investigados.

Los hechos esclarecidos tuvieron lugar entre el 13 y el 17 de diciembre de 2018: durante varias noches, tras la sustracción de un vehículo, este era usado para estamparse contra las cristaleras de establecimientos comerciales -una perfumería en San Juan y una panadería en Mendillorri- y hacerse con dinero y efectos que había en el interior. Posteriormente, los ladrones se daban a la fuga en el mismo vehículo o lo abandonaban en el lugar de los hechos para huir con otro vehículo también robado.

Tras los hechos, alguno de los vehículos sustraídos o su documentación fueron localizados en municipios cercanos a la comarca de las Cinco Villas de la provincia de Zaragoza, una circunstancia que hizo sospechar a los investigadores del Grupo de Robos de la Policía Nacional de que los autores podían ser naturales o estar asentados en localidades limítrofes de Navarra con Aragón. Alguno de los coches, en concreto un Opel Astra, apareció en un paraje completamente calcinado, después de que los ladrones le hubieran prendido fuego para dificultar la obtención de pruebas que pudieran implicarles.

FABRICADOS EN LOS AÑOS 90 Junto a esta pista, hubo otro dato que no pasó desapercibido para los investigadores de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Navarra: la mayoría de los vehículos usados en los alunizajes o en la posterior huida, eran coches de la marca Opel, principalmente modelos Astra, Vectra y Kadett, fabricados entre los años 1990 y 2000, es decir, modelos antiguos, que eran sustraídos a la vieja usanza: mediante el forzamiento de una puerta o la fractura de una ventana, y la práctica de un puente en el cableado de encendido del vehículo.

Después de tres meses de pesquisas, la investigación de la Policía Nacional culminó con la identificación de dos varones navarros, aunque solamente fue posible la detención de uno de ellos, ya que el otro falleció repentinamente durante las pasadas Navidades. Los agentes detuvieron en Pamplona a un varón de nacionalidad española de 33 años de edad, como presunto autor de los tres delitos de robo con fuerza y cinco delitos de robo/hurto uso de vehículo y posteriores alunizajes sucedidos en los barrios de San Juan y Mendillorri.

En el momento que los agentes de la Policía Nacional acudieron al domicilio a practicar la detención de este individuo, se precipitó desde la ventana de su domicilio para intentar huir de los agentes y se fracturó una pierna, por lo que permaneció varios días ingresado en el Complejo Hospitalario de Navarra (CHN). Tras ser puesto a disposición judicial, quedó en libertad, si bien la operación policial sigue abierta y desde la Policía Nacional no se descartan nuevas detenciones vinculadas a este caso.