donostia - Su estado de salud era irreversible y finalmente el vecino de Errenteria de 61 años que fue agredido el domingo por la mañana en Donostia falleció ayer en el hospital. Fue el peor de los desenlaces para un suceso cuya investigación sigue abierta para localizar al varón implicado, cuya imagen estaba ayer en todas las comisarías, puesto que el hombre, que se dio a la fuga tras la agresión, fue grabado por una cámara de seguridad cuando huía del lugar.

Al parecer, el sospechoso fue visto a primera de la mañana del domingo, antes del fatal suceso. Según testigos presenciales que tuvieron ocasión de entablar conversación con él “mostraba en todo momento un discurso incoherente”, lo que hace sospechar de un hombre “con sus facultades mentales mermadas”.

encuentro mortal El siguiente escenario en el que se tiene noticias de él es la calle Miracruz del barrio donostiarra de Gros. Fue en torno a las 10.00 horas, cerca de la plaza Vasconia, cuando se encontró con el vecino de Errenteria. La Guardia Municipal de Donostia y la Ertzain-tza han abierto una investigación conjunta para esclarecer en qué circunstancias se produjo el encuentro y que ocurrió para que se produjera la agresión, tras la cual quedó la víctima tendida en el suelo, con graves heridas de las que sangraba abundantemente.

Los servicios de emergencias no tardaron en llegar. Tras comprobar la gravedad de sus heridas, le trasladaron al Hospital Donostia, donde entró hacia el mediodía en estado crítico, de muerte cerebral. Se investiga si el fatal desenlace fue consecuencia de una caída o si la agresión fue mortal de necesidad tras ser golpeado con algún objeto. “Lo que sí se escucharon fueron los gritos del agredido antes de caer desplomado”, señalaron testigos presenciales.

Tras tener conocimiento de su fallecimiento, el Ayuntamiento de Donostia mostró sus condolencias a la familia del vecino de Errenteria y trasladó su cercanía “en estos duros momentos”. El alcalde de Donostia, Eneko Goia, así como los portavoces de todas las fuerzas políticas del Ayuntamiento lamentaron los hechos y convocaron una concentración de repulsa para hoy a las 12.00 horas en los jardines de Alderdi Eder. Por la mañana, y a preguntas de los periodistas, Goia expresó su “condena”, si bien apeló a “la prudencia” ante las circunstancias “diferentes” que presenta este caso, por “el horario” en que se produjo y la edad de la víctima.

conmoción Se trata de la tercera víctima mortal en Donostia en menos de un año y en unas circunstancias que guardan cierta similitud. Así ocurrió también con la agresión el pasado 26 de abril a Santi Coca, el menor de 17 años que murió dos días después de recibir una paliza en el exterior de una céntrica discoteca.

El fallecimiento del joven Asier Niebla Martínez, tras permanecer en coma durante dos meses, también causó una honda conmoción en toda Gipuzkoa.

Asier, de 28 años de edad, sufrió una brutal e incomprensible agresión en la Parte Vieja de Donostia el pasado 12 de agosto, de madrugada, en plenas fiestas de Semana Grande, mientras hablaba con una chica en el exterior de un bar.