pamplona - El tren de vida que gastaba el acusado José Luis J.H. era sobradamente conocido y ahora, según el escrito de la Fiscalía, se ha descubierto parte del origen de semejante nivel de opulencia que le hacía comprar coches de alta gama al año, incluso para familiares que no conocían su fraude, y gastar en viviendas y restauración. El Ministerio Público detalla que para adquirir una casa en Cordovilla el acusado usó 91.294 euros, parte del precio total, a través de una transferencia irregular de Caja Rural. Así, en 2013, a través de un cheque de 256.350 también sufragó parte de la compra de otra vivienda en el barrio de Iturrama de Pamplona. Para amueblar el domicilio por un total de 179.233 euros abonó cuatro transferencias a la empresa de decoración a través de dinero titularidad de la Caja. No se queda ahí. Llegó a comprar hasta 14 vehículos desde diciembre de 2005 hasta marzo de 2017. Compró un Porsche Panamera por 200.000 euros, usando 106.404 euros de la Caja; para el club de pádel adquirió un Mercedes Benz SL63 por 216.839 euros; y, para sí, compró, entre otros, un Mercedes por 179.863 euros en 2015 y un BMW M6 por 139.700 euros en 2008. - E.C.
