PAMPLONA. El Departamento de Derechos Sociales extenderá de forma gradual el modelo de atención integrada del proyecto europeo Ersisi a toda Navarra, tras su finalización prevista para este mes de septiembre. Los resultados de la evaluación de Ersisi realizados por la Universidad Pública de Navarra (UPNA) aportan evidencias sobre los impactos positivos de este proyecto.

Así lo han explicado, en la conferencia final titulada: “Refuerzo del Derecho a la Inclusión Social a través de la integración de servicios (ERSISI)”, que ha tenido lugar este martes en el auditorio de Civican (Pamplona / Iruña) con más de un centenar de asistentes de toda Navarra, de otras comunidades autónomas y de la Comisión Europea.

Durante la inauguración de la jornada la consejera de Derechos Sociales, Mª Carmen Maeztu, ha destacado, “la importancia que ha tenido este proyecto para impulsar la innovación en los servicios sociales y los servicios de empleo, así como la adaptación a las actuales problemáticas sociales”.

Además, ha manifestado el compromiso de estudiar en profundidad los resultados de la evaluación, realizada por la Universidad Pública de Navarra, para “asegurar la transferibilidad” del modelo, que ha sido pilotado en Tudela y en la Sakana Occidental entre septiembre de 2017 y junio de 2019.

En la mesa de la inauguración la han acompañado representantes de los y las socios y socias del Departamento de Derechos Sociales en la ejecución del proyecto: Anichu Agüera, concejala de Bienestar Social, Mujer e Igualdad del Ayuntamiento de Tudela; Francisco Javier Paz, presidente de la Mancomunidad de Servicios Sociales de Base de Altsasu / Alsasua, Olazti / Olazagutía y Ziordia ; Begoña Pérez Eransus, vicerrectora de Proyección Universitaria, Cultura y Divulgación de la Universidad Pública de Navarra; Ana Díez, directora territorial de CaixaBank en Navarra; y Javier Miranda Erro, Presidente de Fundación Caja Navarra.

En las localidades de Tudela, Alsasua, Olazagutía y Ziordia, el proyecto europeo ERSISI ha promovido un modelo de atención de las personas vulnerables desempleadas (especialmente perceptoras de Renta Garantizada) basado en el trabajo conjunto de los servicios sociales y las agencias de empleo para apoyar el ejercicio del derecho a la inclusión social y la incorporación sociolaboral. Para ello, ha desarrollado herramientas diagnósticas que permiten segmentar a las personas beneficiarias en función de sus necesidades prioritarias, así como planificar respuestas coordinadas e integradas entre los dos servicios.

Durante la conferencia, Andrés Carbonero, director general de Protección Social y Cooperación al Desarrollo y Miriam Martón, directora gerente del Servicio Navarro de Empleo-Nafar Lansare, han afirmado el compromiso del Departamento de Derechos Sociales de continuar perfeccionando el modelo y las herramientas informáticas que le sirven de soporte, y de planificar su transferencia gradual al conjunto de Navarra, transferencia que ya ha comenzado a producirse en las localidades de Burlada / Burlata, Huarte / Uharte y Villava / Atarrabia.

Los resultados de la evaluación

El proyecto ERISISI partió de la hipótesis de que la protección económica que representa el derecho a una Renta Garantizada (Ley Foral 15/2016) no tenía por qué desincentivar que las personas perceptoras desempleadas buscaran reinsertarse en el mercado laboral si, junto con dicha protección, se les proporcionaba un apoyo personalizado, integral e intenso para guiarlas hacia la activación.

Esta hipótesis se ha visto validada, según ha afirmado el equipo evaluador del proyecto (del Departamento de Sociología y Trabajo Social de la UPNA) que ha comparado datos de las 502 personas beneficiarias con un grupo de control de idéntico tamaño y similares características utilizando una metodología de evaluación contrafactual.

Según sus evaluadores, el proyecto ha tenido en primer lugar un impacto en la utilización de recursos para la activación (orientación y formación). Previo a su llegada al proyecto ERSISI, en torno a un 70% de sus 502 personas beneficiarias no habían realizado actividades en los 12 meses anteriores. En cambio, durante su participación en el proyecto realizaron una media de siete acciones de activación para el empleo, lo cual ha resultado en una mejora de su empleabilidad, así como en una vinculación más estrecha con los servicios de búsqueda activa de empleo, ya que la frecuencia de su utilización se prolonga en el tiempo más allá del periodo de la intervención, muy por encima de los datos recogidos del grupo de control.

En segundo lugar, los participantes en ERSISI han tenido un mejor comportamiento en relación con el empleo, si bien este dato, se señaló, ha de tomarse "con cautela" dado que no resultará posible medir el impacto real en el empleo hasta que haya transcurrido un periodo de tiempo más largo desde la finalización de la intervención. No obstante, la presencia de las personas beneficiarias de ERSISI en el mercado de trabajo durante los seis meses siguientes a la finalización de la intervención ha sido superior a la del grupo de control. En torno al 32% de las personas participantes obtuvieron un contrato laboral en el semestre posterior a participar en el programa. La evaluación revela también indicios de mayor calidad en el empleo (contratos de jornada completa) de las personas beneficiarias de ERSISI en comparación con el grupo de control.

Por último, los datos de la evaluación muestran que la evolución en la renta garantizada ha sido también positiva, en tanto que la media de meses percibidos de la prestación disminuye más en el grupo participante que en los sujetos del grupo de control.

El desarrollo de la conferencia

Loli Fernández, coordinadora del proyecto, ha desgranado los principales componentes del proyecto europeo Ersisi, y ha hecho especial hincapié en la capacidad del modelo experimentado para promover una implementación eficaz y ágil de los derechos a una Renta Garantizada y a la inclusión social establecidos en la Ley Foral 15/2016.

Asimismo, ha descrito las herramientas desarrolladas durante el proyecto, como el Sistema de Información del Derecho a la Inclusión Social (SIDIS) en fase de consolidación en todos los Servicios Sociales de Base de Navarra, así como una réplica de éste en la aplicación Orientasare del SNE-NL. Por otro lado, se están terminando de perfeccionar y testar: una “herramienta de triaje” diseñada para ser utilizada por ambos servicios con objeto de segmentar los perfiles que deben recibir una intervención integrada de los servicios sociales y los servicios de empleo; y, por último, una herramienta para la gestión conjunta de casos que permitirá a ambos servicios compartir información de las personas usuarias y planificar intervenciones coordinadas.

Gestoras y gestores de casos del proyecto han descrito aspectos prácticos y metodológicos del mismo, especialmente en relación con los aprendizajes adquiridos y factores de éxito que pueden ser objeto de réplica en otras localidades. En este sentido, situar a la persona en el centro de atención, proporcionar acompañamiento de alta intensidad y generar actividades de formación adaptadas a las personas, fueron subrayados como factores clave para reforzar la autoestima y la motivación de las personas e impulsarlas hacia la consecución de sus objetivos personales y laborales.

Por su parte, la coordinadora del Servicio Social de Alsasua, Arantxa Erbiti, y la responsable de la agencia de empleo de Tudela, Begoña Urdiáin, han destacado el valor añadido que supone para uno y otro servicio el compartir diferentes perspectivas profesionales de cara a diseñar y ofrecer respuestas más integrales y adaptadas a las necesidades de las personas.

Ha clausurado la sesión de la mañana el director general del Observatorio de la Realidad Social, de Planificación y Evaluación de las Políticas Sociales, Luis Campos, agradeciendo el compromiso y la entrega de un gran número de profesionales que, a lo largo del proyecto, realizaron valiosas contribuciones haciendo posibles sus logros.

El proyecto ERSISI fue seleccionado por la Comisión Europea en 2016 para su financiación (de la que el organismo europeo aporta cerca del 75%). El proyecto también recibió apoyo financiero de la Fundación Caja Navarra y de la Obra Social “La Caixa”. Al lado de su principal promotor, el Departamento de Derechos Sociales, otros socios clave han sido: el Ayuntamiento de Tudela, la Mancomunidad de Servicios Sociales de Base de Alsasua, Olazagutía y Ziordia y la Universidad Pública de Navarra.