pamplona - Los resultados de la primera evaluación del programa de ayuda para dejar de fumar que ofrece el Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea muestran que el 35% de los participantes seguía sin encender un cigarrillo al año de entrar en él. Una tasa de abandono del tabaco que asciende a un 40% en las personas que habían recibido apoyo educativo intensivo por parte de un profesional durante ese tiempo. Unos resultados que “han sido un éxito” a juicio de Mª Ángeles Nuin, directora gerente del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra.

El programa de ayuda para dejar de fumar incluye dos niveles de intervención; uno básico, en el cual se da un consejo breve adecuado a cada persona fumadora, y otro intensivo, que consiste en proponer una atención programada, individual o colectiva, por parte del profesional al paciente que quiere dejar de fumar con ayuda. “El apoyo educativo ha sido siempre la base del programa. Luego ha habido períodos en los cuales además se ha complementado con la financiación de fármacos”, señala Nuin.

Desde finales de 2017 se financian en Navarra tres fármacos: la vareniclina, el bupropion y los parches de nicotina. Para financiarlo el departamento de Salud ha destinado 734.222 euros. “La financiación de fármacos para ayudar a dejar de fumar es efectiva para duplicar las tasas de abandono del tabaco. La bibliografía dice que se pasa de un 10 a un 20%”, asegura Nuin.

A la vista de los buenos resultados obtenidos en la comunidad foral, la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud seguirá su ejemplo y también fijará ayudas para dejar de fumar, aunque lo hará parcialmente, ya que solo subvencionará uno de los fármacos; la vareniclina, “un fármaco bien aceptado y que tiene unas tasas de abandono altas”.

Por su parte, el departamento de Salud del Gobierno de Navarra, ahora, además de “continuar con el programa, y que los resultados, que han sido my positivos, se sigan manteniendo a lo largo del tiempo”, tiene otros retos por delante como “profundizar en otras medidas como el tema de espacios sin humo, ir avanzando en la línea de prevención al inicio del consumo o apoyar políticas públicas, por ejemplo, a nivel de convenios marco del control del tabaco”.

En 2018 se incorporaron al programa de ayudas para dejar de fumar de Navarra un total de 6.139 personas, con un número similar de hombres y mujeres (3.054 y 3.085 respectivamente). La mayoría entró a través de los centros de salud (94%), aunque también se puede acceder por medio del Servicio de Neumología y en el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales. Las Oficinas de Farmacia, por su parte, también colaboran. Por grupos de edad, los comprendidos entre los 35 y los 64 años sumaron el 80% del total de las incorporaciones.

La mayoría de los participantes se situaron entre los 35 y los 64 años (80%). El grupo de los jóvenes, formado por personas de 16 a 34 años, congregó al 9% de integrantes del programa. El de los 35 a los 49 años un 38%, dando lugar al segundo grupo de edad con más participantes. El más numeroso, con un 42%, fue el integrado por personas de 50 a 64 años. Por último, los mayores de 65 años fueron un 11%.

Igualdad entre hombres y mujeres. Las personas que participaron en el programa para dejar de fumar en 2018 se repartieron prácticamente al 50% entre hombres y mujeres, siendo 3.054 y 3.085 respectivamente.

6.139

participantes. Es el número de personas que se incorporaron en 2018 al programa para dejar de fumar con apoyo farmacológico.

734.222

euros. El departamento de Salud destinó en 2018 esta cantidad de dinero a la financiación de los tratamientos farmacológicos, que son la vareniclina, el bupropion y los parches de nicotina. El 61% de las personas beneficiarias de la financiación tenían un nivel de renta inferior a los 18.000 euros.