pamplona - El caso de las tres jóvenes hermanas estadounidenses que denunciaron haber sufrido sendas agresiones sexuales en Nochevieja en Murcia despierta, dos semanas después de haberse cometido las supuestas violaciones, numerosos interrogantes.

Las diversas contradicciones en las que incurrieron en su declaración y la circunstancia de que ninguna de ellas permaneciera en España para ratificar su denuncia en el juzgado ha despertado las dudas sobre la autenticidad de su denuncia. La magistrada considera carente de sentido que, tras ser besadas a la fuerza, dos de las chicas se trasladaran a la casa de los jóvenes.

Además, las jóvenes reconocieron al interponer la denuncia que tenían un seguro que contemplaba el supuesto de violación. - D.N.