PAMPLONA, 7 (EUROPA PRESS).

Un estudio liderado por la Universidad de Navarra sugiere que los estudiantes matriculados en educación secundaria para mayores de edad sufren problemas de salud mental con más frecuencia que los de otros programas no universitarios para adultos.

La investigación, publicada en la revista científica Frontiers in Psychology, propone incrementar los recursos psicológicos para atender al alumnado.

Según indica el artículo, 124.092 personas estudiaron a través de esta modalidad en el curso 2016-2017, lo que supuso el 7% del total de los matriculados en educación secundaria básica.

Este nivel educativo es el último recurso para que muchos adultos con antecedentes de fracaso o abandono escolar obtengan esta titulación básica, aseguran los autores principales del estudio, Maite Aznárez, de la Facultad de Educación y Psicología, y Gonzalo Arrondo, del Grupo Mente-Cerebro del Instituto Cultura y Sociedad (ICS) de la Universidad de Navarra. "Es necesaria para acceder al mercado laboral y evitar su exclusión social", ha remarcado Aznárez.

El equipo de investigación realizó una encuesta transversal a 134 estudiantes adultos de educación secundaria básica y 149 de Formación Profesional (FP) en España y comparó los resultados. Se les preguntó si alguna vez habían recibido un diagnóstico profesional de trastornos psicológicos que, posteriormente, se dividieron en tres categorías.

En primer lugar, se categorizaron algunos trastornos típicamente diagnosticados durante la adolescencia o edad adulta: depresión, ansiedad, fobia social, trastorno obsesivo compulsivo, trastorno de la personalidad, trastorno alimentario, esquizofrenia, trastorno bipolar, trastorno de estrés postraumático, abuso de sustancias y problemas con el juego.

Segundo, problemas que afectan principalmente a los resultados escolares: dislexia, discalculia, trastorno del lenguaje y discapacidad intelectual. Finalmente se incluyó de forma independiente el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).

Si bien la frecuencia de problemas de salud mental es alta en ambos grupos, en el primero se detectaron tasas más altas de trastornos psiquiátricos típicamente diagnosticados en la edad adulta, "lo que se atribuye principalmente a una mayor probabilidad de ser diagnosticados con depresión y ansiedad", ha apuntado Arrondo.

Ambos investigadores recuerdan que dichos problemas y las dificultades educativas se pueden retroalimentar, con consecuencias negativas para el individuo, por lo que "es especialmente relevante dotar de recursos psicoeducativos adecuados a este tipo de centros".

El estudio ha recibido financiación de UNED Pamplona, Fundación Caja Navarra y la Obra Social La Caixa, ha explicado la Universidad de Navarra en un comunicado.