Miles de personas -10.000, según los organizadores- se unieron este domingo a la manifestación de la Marea Blanca convocada en Madrid para reivindicar la defensa de la sanidad pública y expresar su rechazo a la “política del ladrillazo” del Gobierno autonómico y, en concreto, al nuevo hospital de emergencias Isabel Zendal.

El manifiesto que dio origen a la movilización contó con la adhesión de más de 4.000 personas y 150 entidades, según los convocantes, y recogió la indignación del sector ante “la caótica y temeraria gestión sanitaria del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso”, así como su petición de que “apueste de manera firme por el refuerzo de la Atención Primaria y Hospitalaria”.

La manifestación recorrió el paseo del Prado y el de Recoletos, entre las plazas de Neptuno y Colón. Los 13 sindicatos y asociaciones que convocaron la protesta coincidieron en reclamar que se incremente la contratación del personal sanitario y en criticar la construcción del hospital Isabel Zendal, cuya inauguración está prevista para mañana martes.

“Quieren inaugurarlo para hacerse la foto y no tienen personal sanitario”, reprochó el secretario general de CCOO Madrid, Jaime Cedrún.

A la manifestación también acudieron representantes del PSOE, Más Madrid y Unidas Podemos.