La Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) ha denunciado las "agresiones" sufridas por agentes del cuerpo este fin de semana durante el desalojo de un "botellón ilegal" que se estaba celebrando en la localidad de Aibar, donde "fueron atacados de forma violenta por un grupo de jóvenes".

Los hechos tuvieron lugar de madrugada en la calle, durante la celebración de las "no fiestas" de la localidad, suspendidas por la pandemia, pese a lo cual sobre las 3:00 horas del sábado los vecinos avisaron de las molestias y ruidos de un grupo de jóvenes que hacían botellón.

La nota refiere además que el propio Ayuntamiento podría haber cedido unos altavoces para que pudieran poner música para celebrar este evento, "una actitud que, a nuestro juicio, es claramente irresponsable por parte del Consistorio ya que con ella se fomentó la celebración del botellón y los posteriores disturbios", subrayan.

Los agentes fueron recibidos con una "actitud violenta" en un episodio en el que, pese a los refuerzos de compañeros llegados posteriormente, "lanzaron todo tipo de bolardos, macetas y botellas de vidrio", lo que se ha saldado con varios agentes con lesiones de diversa consideración al ser alcanzados por los objetos que les lanzaban, aseguran.

Normativa 'pandémica'

Además de esta denuncia, la AEGC reclama al Gobierno central que confeccione una normativa "pandémica" que "diga de manera clara qué se puede hacer y cómo, dado que podemos observar cómo los botellones y situaciones como ésta que denunciamos, se suceden con frecuencia, y como siempre somos los efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad los que quedamos a los pies de los caballos".

También inciden en el "escaso número de efectivos con que contamos en época estival, sin que a nadie se le haya ocurrido que en esta época es más necesario que nunca optimizar bien los recursos porque no es normal el montón de comisiones, adscripciones, reparto geográfico desfasado y demás "boquetes" que se mantienen aún en la Guardia Civil", lamentan.