Ya no se sabe si son los nervios, la presión, el no saber gestionar marcadores adversos o el qué. El caso es que el Helvetia Anaitasuna no acaba de encontrarse esta temporada y ayer cosechó una nueva derrota (27-31) en casa ante un Bidasoa Irun que fue superior y que contó además con el apoyo en la grada de una afición ruidosa y colorida.

Con el de ayer son ya siete partidos sin ganar. Una losa que empieza a pesar y que puede llegar a ser preocupante. El descenso se sitúa ahora mismo a seis puntos, lo marca el Guadalajara, pero no hay que olvidar que a sólo tres está la promoción, puesto que ocupa el Cangas, rival del domingo de los navarros. Un encuentro que se ha convertido en clave si no se quiere meter en líos.

Anaitasuna es capaz de lucir un buen juego y así lo demostró al comienzo del partido de ayer. Bien situado, defendiendo con cabeza, tratando de parar los embates de un conjunto irundarra que en las últimas jornadas ha ido en alza. Las defensas se imponían a los ataques en los primeros compases, costaba marcar, pero poco esa tendencia se fue rompiendo. Las asistencias de Xavi Castro eran oro puro para Bazán o Gastón, que en el m.9 ponían un 4-2 que obligaba a Cuétara a parar el tiempo.

Quique Domínguez: “Estoy poco preocupado”

Quique Domínguez, pese a la derrota y que el Helvetia no consigue encontrar el camino del triunfo, alababa a los suyos. “Viendo al equipo jugar hoy, estoy poco preocupado. Me gustaría tener más victorias y puntos, hacemos mucho para conseguirlas”, resaltaba. Para el técnico gallego, el parcial de 0/5 al final de la primera parte hizo “mucho daño”, cuando “estábamos jugando a un nivel altísimo defensivo, de contraataque y de eficacia. Nos ha castigado mucho”. En la segunda hubo “buena reacción y nos hemos acercado, pero con algunos errores y aciertos de ellos se han llevado la victoria. Creo que lo han merecido”.

La efectividad de Cavero desde los siete metros o de Aginagalde desde el pivote hicieron que pronto el Bidasoa igualara la contienda. Pero ninguno de los dos equipos se iba con claridad ni era capaz de romper el choque. Al menos hasta el final de la primera parte. Bonanno abandonó la pista con la nariz ensangrentada –apunta a que rota– tras recibir un golpe de Gorka Nieto en un lanzamiento que terminó en gol. Una acción que acabó siendo clave en el 0/5 de parcial que los guipuzcoanos endosaron al Helvetia, que acababa por irse al descanso con un 13-17 adverso.

Anaitasuna parecía bloqueado en la reanudación, con lanzamientos que se iban fuera e incluso siete metros que no prosperaban, como el que Mehdi detuvo a Redondo. Ello propició que el Bidasoa, con la efectividad además de Asier Nieto, no renunciara a la renta de cuatro goles en los diez primeros minutos.

Sin embargo, los de Quique Domínguez supieron reaccionar. Gracias, en buena medida, a la aparición de Cancio. Sus intervenciones fueron determinantes para que su equipo se pusiera a dos (22-23, m.48).

Con todo, de nuevo los fantasmas, los balones que se escurren de las manos, el tiro que cuesta hacer o que si se hace sale fuera, unido a que al rival le salía todo, volvieron a desquiciar a los navarros. Salinas se entonó desde el exterior, los dos Nietos no daban tregua con su efectividad y poco a poco la ventaja volvía a lanzarse en favor de los irundarras.

Al final, 27-31. Una nueva derrota y ahora a pensar en Cangas. Un partido donde el resultado será clave para evitar problemas. l

Helvetia 27

Bidasoa Irun 31

HELVETIA ANAITASUNA (13+14) Juan Bar (portero), Gastón, Bazán, Edu Fernández, Ganuza, Meoki y Bonanno –siete inicial–. También jugaron Cancio (portero), Pinto, Aitor García, Xavi Castro, Ernesto Goñi, Elustondo y Chocarro.

BIDASOA IRUN (17+14) Skrzyniarz (portero), Cavero, Zabala, Aginagalde, Rodrigo Salinas, Pacheco, Asier Nieto –siete inicial–. También jugaron Mehdi (portero), Furundarena, Silva, Gorka Nieto, Dariel García, Julen Mujika, Tao, Víctor Rodríguez y Nieto Marcos.

Marcador cada cinco minutos 1-1, 4-2, 7-6, 11-9, 12-12, 13-17 (descanso); 17-19, 19-22, 22-26, 24-28 y 27-31 (final).

Árbitros Jordi Ausás Busquets y Miquel Florenza Virgili (Comité catalán). Excluyeron a Silva por los visitantes.

Pabellón Anaitasuna. 768 espectadores. Unos 70, seguidores del Bidasoa Irun.