Disfrutan de unas vistas privilegiadas. Con la Sierra del Perdón a la izquierda, más al fondo la de Alaiz con su cantera, a la derecha la preciosa ermita octogonal de Santa María de Eunate y sobre todo rodeadas de extensos campos que más adelante se bañarán con el dorado del cereal. Un paisaje idílico por el que caminan y se pierden asiduamente la nueva incorporación del Replasa Beti Onak, Mariana Costa, y su pareja, la exjugadora del desaparecido Itxako Deonise Fachinello, campeonas del Mundo con Brasil en 2013 y que han acabado echando raíces en Muruzábal junto al pequeño Buteco, un peludo pomerania negro de 3 años que irradia felicidad cada vez que pisa la calle.

Mariana, de 31 años, y Deonise, de 40, llevan una década juntas, hace tres que se casaron en su país natal y su vida deportiva las ha llevado a hacer las maletas continuamente de un lugar a otro. En pareja, en el mejor de los casos, o por separado. Pero ahora el fichaje de la primera por el equipo de Villava-Atarrabia, que se materializó a finales de 2023, las ha llevado a ambas a asentarse en esta pequeña población de Valdizarbe, de unos 260 habitantes y situada a unos 22 kilómetros de Pamplona, de la que Deonise se enamoró cuando estuvo jugando en el conjunto de Estella-Lizarra y donde acabó adquiriendo una casa en la que han ido viviendo estos años de manera intermitente mientras desarrollaban sus carreras por países como Austria, Francia, Dinamarca, Rumanía o Hungría.

“Cuando jugábamos, siempre veníamos de vacaciones. Compré la casa cuando estaba en el Itxako y ahora ya vivimos con más tranquilidad aquí”, explica la exlateral brasileña, ya retirada, que jugó en dos etapas en el club navarro: la primera, cuando fichó en la temporada 2007-2008 y estuvo hasta mitad de la siguiente; y la segunda cuando regresó en el curso 2011-2012. “Este fue el primer país en el que jugué al salir de Brasil y me encantó. La región me gustó mucho y dije que no quería salir de aquí. Quería vivir en esta tierra. Sólo me fui por los problemas del equipo. Si no, no me hubiese marchado. Continué jugando en otros países, pero siempre mantuve la casa”, recuerda.

En 2012, durante una concentración con la selección de Brasil, conoció a Mariana Costa. Poco a poco fue surgiendo el amor entre ellas, iniciaron una relación que ya dejaba destellos cuando se proclamaron campeonas del Mundo en Serbia en 2013, y que acabó por afianzarse. Tanto que llevan ya diez años juntas, camino de once, y hace tres que sellaron su unión en plena pandemia con su casamiento en Brasil. Sin embargo, no es fácil echar raíces lejos de la tierra, sobre todo cuando no se tienen vínculos afectivos en la nueva. Y así lo reconoce Deonise Fachinello: “Cuando empezamos a conocernos, a Mariana no le gustaba mucho la idea de vivir en Europa. Quería volver a Brasil por su familia. Las dos tenemos a nuestras familias allí. Aquí estamos solas. Yo ahora tengo un primo que vive en Italia, es el único pariente que tengo cerca. El único que tenemos en Europa. Yo no quería volver a Brasil, así que al final miramos y analizamos. Le dije que si le gustaba la casa y el lugar adelante, y si no la vendíamos y empezábamos en otro lugar”.

“Compré la casa cuando estaba jugando en el Itxako. Quería vivir en esta tierra”

DEONISE FACHINELLO - Exjugadora del Itxako

Al final, se quedaron. Muchas veces, además, la familia de sangre no está presente, pero sí la que se acaba cruzando por el camino. “Hay gente que nos ha ayudado mucho. Yo tengo en Estella un padre y una madre, así los llamo yo. Desde que llegué al Itxako me acogieron y me abrazaron. Mi padre falleció el año pasado, pero mi madre sigue allí”, dice con emocionadas palabras.

Fichaje por el Beti Onak

Después de idas y venidas, de estancias temporales únicamente por vacaciones, ahora la pareja goza de una mayor estabilidad en Muruzábal. El motivo ha sido el fichaje de Mariana Costa por el Replasa Beti Onak, con el que ya ha jugado dos partidos de Liga frente al Porriño y contra el Atticgo Elche, además de otro correspondiente a la Copa de la Reina. Una eliminatoria en la que las navarras acabaron apeadas tras ser superadas precisamente por el Porriño.

Para Costa, su llegada al equipo de Villava-Atarrabia supone un gran “reto”. Pero no ha sido fácil. La extremo zurda brasileña –que también puede jugar en el lateral– se incorporó a su nuevo destino tras disputar entre los meses de noviembre y diciembre el Mundial de Dinamarca, Noruega y Suecia, en el que su país finalizó en novena posición. Se desvinculó del Debreceni húngaro, donde incluso estaba jugando la Champions europea, y acabó enfundándose la camiseta verdinegra.

“El entrenador tenía preferencia por jugadoras húngaras para jugar. Creo que eso pasa en muchos sitios. Pero yo quería tener minutos, puesto que están muy cerca los Juegos Olímpicos”, explica la integrante del Beti Onak. “Me pasó que jugaba un partido de Champions y luego los tres siguientes estaba fuera o no tenía tantos minutos. No podía estar en un sitio en el que no podía dar el cien por cien, sin jugar. No estaba feliz. Yo quería aportar”, continúa.

La pareja, en uno de los parques del pueblo. Javier Bergasa

Mariana Costa habló entonces con su agente, el conocido excapitán del Barça Víctor Tomás. “Le dije que ya sabía que era complicado, pero que me quería ir. Y él estaba conmigo”.

Después de un descanso tras el Mundial, la internacional brasileña necesitaba ponerse a entrenar inmediatamente para no perder de vista el objetivo olímpico. Víctor Tomás se puso en contacto con el conjunto de Villava-Atarrabia y al principio “sólo entrenaba, para no estar parada”. “Me sentí muy bien, por el ambiente, las compañeras...”. A su compatriota Brasil Pereira ya la conocía de haber coincidido una vez en la selección, en las filas navarras también estaba por entonces otra brasileña, Gabi Romero, e incluso se había enfrentado a las argentinas Maca Sans y Ayelén García en partidos internacionales.

“Necesito estar en un sitio donde pueda aportar mi balonmano, mi carácter y mi forma de ser”

MARIANA COSTA - Jugadora del Replasa Beti Onak

Tras un tiempo entrenando, Víctor Tomás le comunicó a la extremo zurda la intención del Beti Onak de hacerle una oferta. “Tenía otra de Rumanía y al principio lo estuve valorando. Hablé mucho con mis padres, que ahora están aquí con nosotras, y con Deonise. Yo necesito estar en un sitio donde pueda aportar mi balonmano, mi carácter y mi forma de ser”, apunta.

Y ese sitio lo encontró. En el club navarro. Muy cerca de casa además. Donde está dispuesta a dejarse la piel para que el equipo salga de los puestos de lucha por el descenso y mire más arriba. “Tengo la seguridad y la confianza de que saldremos de ahí, porque veo todos los días cómo entrenamos”, asegura.

A su pareja se la ve feliz con la decisión, pero tenía claro que no iba a interferir en los deseos de su mujer. “En cuestión de balonmano, siempre lo hemos tenido claro. Somos profesionales y nunca hemos decidido la una por la otra. Yo le decía que tenía que buscar lo mejor para ella. Si debía vivir en Noruega y yo aquí, pues ya está. O yo podía irme con ella. Yo no tengo el reto de ir a unos Juegos Olímpicos, yo eso ya lo cumplí. Al final, ella tenía que valorar dónde iba a ser más feliz”, explica.

Una vida tranquila

Una vez tomada la decisión de jugar en el Replasa Beti Onak, todo ha ido más rodado. Mariana coge su vehículo y se desplaza durante la semana hasta Villava-Atarrabia para cumplir con sus entrenamientos y partidos. A veces, incluso, hacen pesas juntas en el gimnasio. Deonise, por su parte, está ahora más centrada en formarse en otros ámbitos. Nada relacionado con el deporte, algo que tenía claro. Además de estar volcada en la cocina –damos fe de que hace unas tartas riquísimas–, le encanta también el mundo de la manicura y está haciendo cursos para prepararse. 

Fachinello aún guarda en su memoria muchos recuerdos bonitos de aquel Itxako que asombró aquí y en Europa. Donde llegaron a jugar las mejores del mundo como Silvia Navarro –aún en activo–, Nerea Pena, Carmen Martín o la única balonmanista navarra con medalla olímpica, Andrea Barnó, con la que coincidió hace poco en Estella-Lizarra. “Sigue igual”, asegura la exlateral brasileña, quien no puede evitar que se le ponga “la piel de gallina” al recordar aquellos años y el cariño de unos aficionados “que nos paraban todo el rato por la calle”.

Y, cuando no están centradas en sus obligaciones, disfrutan de su vida en Muruzábal. Por este pueblo, paso obligado del Camino de Santiago francés, y por sus alrededores caminan con Buteco –cuyo nombre está relacionado con un lugar al que Mariana acudía con su abuelo–. También “caminamos por la ermita de Eunate, tomamos algo con los vecinos en el bar, con la dueña, vamos a Pamplona a comer un pintxo...”. En definitiva, una vida de lo más placentera. 

Costa, en el partido del sábado pasado ante el Elche. Javier Bergasa

MARIANA COSTA

Fecha y lugar de nacimiento. 14 de octubre de 1992 en Sao Paulo (Brasil).

Club actual. Replasa Beti Onak, al que se acaba de incorporar. Hasta la fecha, la extremo y lateral zurda ha disputado dos partidos de la Liga Guerreras Iberdrola –ante el Porriño y el Atticgo Elche– y uno de la Copa de la Reina, en el que las de Villava-Atarrabia fueron eliminadas en casa por las gallegas.

En su trayectoria. CPH Handebol de Brasil (hasta 2013), Vendsyssel Håndbold de Dinamarca (2013-2014), Hypo Niederösterreich de Austria (2014-2015), Nykøbing FH de Dinamarca (2015-2017), CS Măgura Cisnădie de Rumanía (2017-2018), SCM Craiova de Rumanía (2018-2019), Gloria Bistrita de Rumanía (2019-2021), Debreceni VSC de Hungría (2021-2023) y ahora en el Beti Onak.

Algunos de sus títulos por clubes. Liga danesa con el Nykøbing FH en 2017; y Liga austriaca con el Hypo Niederösterreich en 2015, año en el que también se alzó con la Copa defendiendo la misma camiseta.

Idiomas. Portugués, inglés, danés, castellano y rumano.

Selección. Su mayor logro es el título Mundial de 2013 en Serbia. También ha cosechado éxitos en los Panamericanos.

Deonise Fachinello, en 2012 con el Itxako. Archivo

DEONISE FACHINELLO

Fecha y lugar de nacimiento. 20 de junio de 1983, en Santa Rosa (Brasil). Tiene también la nacionalidad italiana. 

Retirada. Deonise dejó las pistas a nivel profesional en 2022. 

Dos etapas en el Itxako. La exlateral llegó en la temporada 2007-2008 y en mitad de la campaña 2008-2009 se fue a Austria. Regresó en la 2011-2012. 

En su trayectoria. Llegó de la mano del Club León Balonmano (2006-2007). Posteriormente fichó por el Itxako, para recalar luego en el Hypo Niederösterreich de Austria (2008-2009). También pasó por el Havre HAC francés (2009-2011), antes de volver al Itxako. Se fue de nuevo al Hypo Niederösterreich (2012-2014), luego al CSM București de Rumanía (2014-2015), al Nykøbing FH danés (2016), al Odense danés (2016-2017), al Măgura Cisnădie de Rumanía (2017-2018), al SCM Craiova de Rumanía (2018-2019), al Bourg-de-Péage francés (2019-2021)y al Debreceni VSC húngaro (2022).

Títulos. Entre otros, con el Itxako ganó la Liga, la Copa de la Reina, la Supercopa de España y fue subcampeona de la EHF.

Idiomas. Portugués, castellano, francés, inglés, alemán e italiano.

Selección. Mundial en 2013 y varios oros en los Panamericanos.