SUPER AMARA BERA BERA 32

AULA VALLADOLID 24


Super Amara Bera Bera (20+12) Maddi Aalla (Alice Fernandes); Arrojeria (4), Mariane Fernandes (5), Gavilán (3), Boada (4), Alba Menéndez (1), Laura Hernández (4, 2p), Cavo (2), Etxeberria (2), Lyndie Tchaptchet (2), Loidi, Carmen Arroyo (1), Erauskin (3), Lydia Blanco (1) y Elke Karsten.

Caja Rural Aula Valladolid (15+9) Sanz, (Alicia Robles); Elba Álvarez (2, 1p), Jimena, Lucio (2), O’Mullony (6), Bazco, Téllez, Botella, Teresa Álvarez, Antón, Romero (4), Arounian (2), Bergara, González de Garibay (7) y Claudia Moreno (1).

Marcador cada cinco minutos 3-2, 7-4, 9-7, 12-10, 16-13, 20-15 (descanso); 23-16, 26-17, 28-18, 30-20, 31-23 y 32-24.

Árbitras Lorena García y Tania Rodríguez. Excluyeron a Carmen Arroyo, Erauskin, Téllez y Lucio.

Pabellón Illunbe-Donostia Arena. 4.238 aficionados, un en nuevo récord de asistencia en un encuentro de Copa de la Reina. 


La navarra Lyndie Tchaptchet se ha proclamado este domingo campeona de la Copa de la Reina con su equipo, el Super Amara Bera Bera, que ha vencido en la final al Caja Rural Aula Valladolid por 32-24, adjudicándose así su octavo título copero. Para la pivote de Villava-Atarrabia de 19 años, que fichó esta temporada por el conjunto donostiarra tras dejar el Replasa Beti Onak, es su primer trofeo en esta competición. A principios de campaña se alzó también con la Supercopa.

Este título, además, otorga pasaporte europeo al Bera Bera, que tras otra exhibición defensiva y pleno acierto en ataque venció a las vallisoletanas, quienes aguantaron sólo 25 minutos.

Empezaron fuertes las donostiarras y parecía que, al amparo de sus miles de aficionados iba a tener un dominio claro del encuentro, sobre todo porque la estrella vallisoletana Prieto O'Mullony estaba contenida, de forma que enseguida las locales cogieron rápidamente cuatro goles de renta.

La navarra, en un lance de la final. Arnaitz Rubio

Un parcial de 1-5 para las pucelanas, sin embargo, permitió al equipo de Miguel Ángel Peñas empatar el encuentro y mandar a las anfitrionas el mensaje de que iban a pelear el triunfo y su favoritismo hasta el límite de sus fuerzas, ahora con O'Mullony volviendo a hacer daño con sus disparos y penetraciones.

Un tiempo muerto cuando las cosas se le complicaron a Bera Bera tuvo un resultado magnífico para sus intereses ya que, con otro parcial de 3-0, volvió a coger un timón de la final que no abandonaría y a estresar a un Aula Valladolid al que le costaba un mundo descifrar la defensa de las donostiarras.

El empuje final de Bera Bera, con Boada y la argentina Cavo plenas de inspiración, les permitiría llegar con una renta de cinco goles que era todo un tesoro. Si las fuerzas no fallaban, podría ser determinante.

Las guipuzcoanas siguieron firmes en la reanudación, la brasileña Mariane Fernandes era el desatascador con su poderoso lanzamiento y Valladolid se quedaba sin ideas y sin pilas para seguir el ritmo de las de Illunbe.

Miguel Ángel Peñas, que agota sus últimos días en el banquillo, se la jugó con un último tiempo muerto en el que pidió darlo todo a un equipo que caía ya por siete goles y que no llegaría a dar las prestaciones necesarias para meterse en una final que se llevó de calle el Bera Bera.