Son muchas las personas que recurren a la reproducción asistida para sortear problemas de fertilidad, bien por una maternidad cada vez más tardía o por cualquier otro motivo, y poder así cumplir su sueño de ser madres o padres. De hecho, la reproducción asistida es ya responsable del 11% de los nacimientos en el Estado.
Como consecuencia, la medicina reproductiva es una ciencia en continua evolución para adaptarse a las nuevas necesidades de la sociedad. Este hecho quedó patente en el 11º Congreso Internacional IVIRMA, uno de los mayores eventos mundiales centrado exclusivamente en la reproducción asistida, celebrado recientemente en Barcelona. Más de 1.400 especialistas de 58 países se reunieron para compartir investigaciones, debatir nuevas técnicas y mirar hacia el futuro de la fertilidad.
IA para obtener el mejor embrión
El director científico del congreso y de IVIRMA, el profesor Juan Antonio García Velasco, hizo hincapié en las próximas revoluciones que se van a producir en el ámbito de la medicina reproductiva y en las que la inteligencia artificial (IA) y las nuevas herramientas para el análisis genético del embrión tienen mucho que decir.
"La IA ya es una realidad en reproducción asistida y está dando grandes frutos en materia de investigación y práctica clínica. Estamos hablando de reducir el tiempo en reproducción asistida, aumentar la tasa de embarazo, distinguir el espermatozoide con mayor capacidad para fecundar el ovocito y dar lugar a un embrión, así como identificar los óvulos de mejor calidad. Estos hechos contribuyen indudablemente de manera muy positiva a conseguir mejores tasas de éxito".
Diagnóstico genético preimplantacional
En el congreso se presentaron además otros grandes avances en el campo de la genética, entre ellos un estudio sobre la introducción de la secuenciación genómica completa en el diagnóstico genético preimplantacional. En concreto, este avance podría permitir leer el exoma completo para identificar más riesgos de enfermedades graves en la descendencia. "Esto supondría una gran revolución en la evaluación del perfil genético de un embrión en relación con enfermedades hereditarias y adquiridas", señala García Velasco.
Crear óvulos y espermatozoides
Sin embargo, el avance más sorprendente presentado en el congreso llegó desde el ámbito de la biología celular. El doctor Denny Sakkas, director científico de IVIRMA en Norteamérica y profesor en la Universidad de Yale, compartió los últimos progresos en gametogénesis in vitro, una técnica experimental que busca generar espermatozoides y ovocitos a partir de células madre.
Por el momento se ha logrado generar tanto espermatozoides como óvulos a partir de células madre pluripotentes inducidas (iPSCs) y de células madre embrionarias (ESCs) en modelos de ratón. Sin embargo, Sakkas señaló: "Aunque los hallazgos en ratones han sido todo un éxito, trasladarlos a aplicaciones humanas sigue siendo un desafío. Se han logrado grandes avances en el desarrollo de esperma, pero todavía no se han generado ovocitos humanos completamente maduros".
El experto señala que "los principales obstáculos han sido replicar el nicho ovárico, garantizar una división meiótica adecuada y lograr la reprogramación epigenética comparable con la gametogénesis natural". Sakkas apunta además que la aplicación potencial de la oogénesis in vitro podría revolucionar la medicina reproductiva al ofrecer nuevas soluciones de fertilidad para individuos incapaces de producir gametos viables”.
Maduración de óvulos en el laboratorio
Otro de los grandes ejes de investigación del trabajo presentado en el congreso fue el de la maduración in vitro (IVM), técnica que permite recolectar ovocitos inmaduros directamente de los ovarios para cultivarlos en un laboratorio, donde pasan por un proceso de maduración en un ambiente controlado.
“La IVM es particularmente beneficiosa para mujeres con síndrome de ovario poliquístico o que están en riesgo de desarrollar síndrome de hiperestimulación ovárica. Ofrece una opción menos invasiva y más natural para la recolección de óvulos, reduciendo el riesgo de complicaciones asociadas con la terapia hormonal”, concluyó el doctor Sakkas.
Óvulos cultivados en laboratorio, inteligencia artificial capaz de detectar al mejor embrión o diagnósticos genéticos cada vez más precisos; ciencia y tecnología al servicio del ser humano para conseguir procesos de reproducción asistida más eficientes, personalizados y accesibles.