Igor Arrieta Lizarraga (Uharte-Arakil, 8/12/2002) tenía un objetivo, conseguir su primera victoria como ciclista profesional y en la 102ª edición de la Clásica de Ordizia lo consiguió, pese a todos los pronósticos que daban como claro ganador a su compañero de equipo Isaac del Toro. El corredor navarro, de 22 años, comenzó en el ciclismo profesional en el Kern Pharma, pero uno de los equipos mas importantes de la actualidad no dudo en ficharle en 2023 y desde entonces forma parte de la plantilla del UAE Team. El joven ciclista pese a competir hace poco a nivel profesional, ya ha demostrado ser uno de los talentos mas importantes de nuestro país en grandes como el Giro o la propia Clásica de Ordizia.
Este año ha disputado varias carreras pero destacan dos, la primera la clásica de Ordizia. ¿Cómo definiría esa sensación de lograr tu primera victoria como profesional?
La verdad que en el momento es muy especial, al final todos trabajamos y es una victoria de todo el equipo. Todos hemos ganado antes, en amateur, pero por mucho que tengas buen rendimiento, siempre lo que se busca es el primer puesto, te quitas el peso de la primera victoria y es una recompensa al trabajo que has hecho durante todos estos años.
Una clásica que se podría definir como una carrera de remontadas. ¿Cómo analiza su carrera brevemente?
El final estuvo repleto de altibajos, porque teníamos la idea de que lo intentase yo en la fase final y que Del Toro estuviese atento a los posibles cortes que se hacían. Al ver que me pillaba Carr, arrancó él y al ver que yo tenía a Del Toro delante fui con todo para intentar cogerle cerca de la meta. Conseguimos llegar juntos al tramo final y ya sabía que me iba a dejar ganar.
¿En qué punto de la carrera se vio ganador?
Hasta no cruzar línea de meta no te ves ganador pero sí que es verdad que en la última bajada a tres kilómetros de meta ya lo vi bien y a falta de dos kilómetros cuando vi que tenía entre veinte y treinta segundos de ventaja veía imposible que se me escapase la victoria, pero hasta que no cruzas la línea de meta no puedes asegurar nada.
¿Tenía presión por conseguir esa primera victoria?
Desde el equipo no había presión y por fuera es más la que me puedo meter yo, porque a todos nos gusta ganar y por ver que todo trabajo tiene su recompensa.
¿Alguna carrera como la Clásica de Ordizia que tenga en mente en un futuro para intentar desempeñar un buen papel?
Ahora a final de año corro la clásica de Donosti, que son palabras mayores a nivel de equipos, pero también está Getxo, que creo que es una carrera en la que puedo estar adelante. Luego vueltas por etapas a final de año como la Tour of Britain, Luxemburgo o Croacia, son carreras que no van los grandes líderes de los equipos y puedo tener esa oportunidad.
Disputó la clásica con Isaac del Toro, su compañero de equipo. ¿Cómo es competir con uno de su mismo equipo?
La verdad que bien, entre los dos tenemos muy buena relación, hemos corrido varias veces juntos, como el Giro y el año pasado varias también. Dio la casualidad de que entramos los dos juntos al equipo y cuando vas a un sitio nuevo te apoyas en la persona que está igual que tú. Una buena relación que por mucho que estemos en la misma carrera, no es mi rival, algún día seré yo, otros será él.
Además comparte equipo con el mejor ciclista de la actualidad, Tadej Pogacar. ¿Cómo es su relación y que puede aprender de alguien como él?
Tenemos una relación de compañero de equipo, no mucho más, apenas coincidimos a no ser que sea en concentraciones, pero este año no nos ha tocado correr juntos. Es una persona en la que te puedes fijar mucho, aunque hay cosas que no puedes aprender como por ejemplo cómo es capaz de ir tan rápido. Pero ves cómo es con todos los compañeros de agradable y la tranquilidad que transmite cuando está en carrera parece que tiene todo bajo control, parece que está por y para la bici, pero sabe despejarse y cuando lo ves te ayuda a darte cuenta que no es todo el ciclismo.
También disputó el Giro con el UAE Team. ¿Cómo viviste ese, su primera gran vuelta?
Fue un poco pena el último día perder el Giro, pero al final puede pasar cualquier cosa, así son estas vueltas. Yo tenía muchas ganas de correr y luego allí con ilusión y además viendo como íbamos con Isaac de líder yo creo que será un Giro que difícilmente voy a olvidar por las circunstancias de carrera que vivimos.
Finalizó en tu primera grande por etapas en el puesto 36º, para ser su debut es un gran resultado. ¿Qué espera de sí mismo en la siguiente grande que participe?
Espero seguir en la misma línea desde que pasé a profesionales, seguir poco a poco mejorando carrera a carrera y seguir intentando aportar el nivel que puedo dar al equipo para seguir consiguiendo victorias, ya sean mías o del equipo. Seguir creciendo en las grandes.
Además acabó como el 10ª mejor joven. ¿Con qué metas fue al Giro y que nota le pondría a su participación?
Mi objetivo era llegar lo mejor que sabía y podía al Giro, no tenía un objetivo como ganar una etapa, mi objetivo era ayudar lo máximo posible al líder del equipo sabiendo que íbamos a intentar ganar la general con Isaac del Toro. Quería tener el nivel para moverme dentro del pelotón de una grande con el nivel que eso conlleva y no ir todos los días sufriendo. Poder sufrir pero demostrar el nivel que tengo y creo que lo conseguí. Ponerle una nota a tu cabeza en mi caso es difícil porque siempre ves cosas en las que mejorar pero me daría un ocho de nota.
¿Cómo vivió su primera grande desde el tema físico?
A nivel físico fue la carrera más dura que he corrido nunca, pero a nivel mental también la última semana cuesta mucho, el salir todos los días con el dolor de piernas que tienes en la salida y pensar que tenías 200 kilómetros de recorrido. Sufrí mucho, pero a nivel físico, la última semana todos estábamos igual.
¿Mentalmente cómo es estar inmerso en una carrera así de tanto tiempo?
Este año al empezar en Albania el Giro casi duró un mes entero, casi cuatro semanas. Muchas veces no sabes ni dónde duermes ni por dónde pasa la carrera realmente, a partir de unos días entras en el bucle de carrera, solo piensas en llegar al hotel y descansar y ya centrado en la siguiente etapa. Luego cuando acabas puedes hacer un poco la valoración, pero cuando estás en carrera es como si estuviésemos en una burbuja y no tienes consciencia de lo que pasa fuera.
En el año 2023 fichó por el UAE. ¿Cómo han ido estos dos primeros años con el equipo?
Fue un año raro porque sufrí un accidente importante y de la nada me llamó el UAE, uno de los mejores equipos, y fue una gran alegría para todos. Al principio pues no sabes donde te metes, al final mucha gente trabaja en el equipo, el cambio de idioma, cambio de compañeros pero creo que me he adaptado bien. También he visto que al final todos somos personas y por mucho que ganen carreras, no son superiores o no eres diferente a nadie. Dentro del equipo hay muy buen ambiente y me he adaptado bien.
Hablando ya sobre el futuro, ¿qué objetivos se pone para este final de año y el siguiente?
Para este año era dar otro paso adelante a nivel de rendimiento, conseguir alguna victoria y ahora para lo que queda la intención es seguir en esa línea y seguir mejorando algunos aspectos poco a poco y, por qué no, buscar otra victoria y seguir ayudando al equipo. Para el 26 no tengo objetivos claros, pero me gustaría seguir mejorando y para eso volver a preparar una grande por etapas.
¿Cual sería un sueño a cumplir en un futuro?
Si me hubieras preguntado hace una semana, sería ganar una carrera como la clásica de Ordizia. Y soñando sería ganar una etapa en cualquiera de las grandes. l