BILBAO. A diferencia de las cifras positivas que ofrecían ayer la Asociación de Promotores Musicales de España (Promusicae), los profesionales de este sector que trabajan en la CAV y Navarra alertaban, también ayer, de los estragos que la crisis económica está haciendo en los escenarios, sobre todo tras hacerse notar en los despachos de las áreas de cultura de Ayuntamientos, diputaciones y Gobierno Vasco. Y, como muestra, un botón: en el último año, se ha producido un descenso del número de conciertos contratados y se han cancelado circuitos y festivales, como KobetaSonik y Gaztemaniak.
La situación en la industria musical está mal. Tan mal que 45 empresas que desarrollan su actividad en este ámbito cultural se han asociado en la Plataforma de la Industria de la Música de Euskal Herria (EHMIP). Desde estudios de grabación a equipos técnicos, pasando por asociaciones de conciertos, algunas discográficas y promotoras. Aunque faltan algunas de las empresas más importantes, conviene resaltar la representación lograda en el sector gracias a Producciones Serrano, Ama Lur, Eurpel, Baga Biga, Balea Musika Ideak, Dekker, Hilargi Records, Kap Produkzioak, Tio Pete Estudios, Star Lan, Radiation o Shot Grabaciones, entre otras. Durante su presentación al público, EHMIP exigió "respeto y ayuda" a las instituciones, y pidió a la sociedad que acuda a los recitales, ya que de ello depende la continuidad de unos 1.500 puestos de trabajo.
Bilborock se quedó pequeño en la presentación del manifiesto difundido por la asociación. Un texto que consta de un decálogo que defiende "la existencia de una industria musical en Euskal Herria", formada por profesionales y que "reivindica su espacio futuro", ya que para los firmantes "la música en vivo es un bien cultural imprescindible y parte de nuestra cultura". Igor Otxoa, de Euprel, y José Ángel Serrano, de Serrano Producciones, fueron los encargados de la lectura del manifiesto, en el que se recuerda que "por cada músico que sale al escenario al menos diez personas trabajan para que la magia sea posible". Gente como promotores, técnicos de sonido e iluminación, encargados de montaje, seguridad, administración y comunicación, cuyos puestos de trabajo están "seriamente amenazados por la crisis" tras cuatro décadas en las que "han sostenido y promovido el tejido industrial vasco".
No en vano, peligran "los puestos de trabajo y la estabilidad de muchas familias" debido a la crisis. En la actualidad son más de un centenar las empresas que trabajan directamente en este sector, con una estimación de más de mil empleos directos. Eso, sin contabilizar los más de 500 músicos profesionales, técnicos del espectáculo y un amplísimo número de empleos indirectos relacionados con actividades como la restauración, el transporte, las artes gráficas, el diseño o la docencia.
Serrano aseguró que la crisis está afectando gravemente al mundo profesional de la música, haciendo peligrar sus condiciones laborales. "Exigimos dignidad y respeto para nuestro trabajo", defienden, a la vez que solicitan "responsabilidad" a políticos, programadores y medios de comunicación públicos. El portavoz de Kultura Live/Asociación de Salas de Conciertos, Alberto Bocos, aseguró que la crisis está provocando la cancelación de "un montón de conciertos" y el cierre de salas. "En algunos casos, de cuatro al mes se ha pasado a uno, lo que repercute en hoteles, seguridad, restauración… Se trabaja menos", indicó. Serrano dijo carecer de datos concretos respecto a los puestos de trabajo perdidos al ser un sector muy atomizado. "Lo innegable es que se están perdiendo. Y proseguirá en 2011, que será un año malo para el sector", indicó. A día de hoy, la Plataforma de la Industria Musical Vasca anuncia "una reducción entre el 30 y el 70%" en los presupuestos dedicados a la música en directo por las instituciones. El colectivo se siente "pagano" de esta crisis. "¿Cómo es posible que se apoye directamente a la industria del automóvil o del mueble y no se proteja a la industria musical vasca? Extendemos nuestra mano para buscar alternativas, pero no estamos dispuestos a asumir un recorte de presupuestos superior al de otros sectores", finalizó Serrano.