- El cierre de la plaza del Ayuntamiento con motivo del concierto de Remedios Amaya causó ayer malestar entre los comerciantes tanto de la plaza Consistorial como de zonas próximas, al ver limitado el acceso a sus establecimientos durante más de dos horas y "sin previo aviso", según apuntaron.

Desde la Asociación Casco Antiguo emitieron un comunicado denunciando la gestión del Ayuntamiento de Pamplona y entidades implicadas y mostrando "su contrariedad por el cierre, sin previo aviso, durante más de dos horas, de 11.00 a 13.00 horas, de la plaza Consistorial".

Dicho cierre, continúa la nota, "ha llevado aparejada la paralización prácticamente total de la actividad comercial de los establecimientos de la zona". Además, el cierre se dejó sentir a calles próximas como Santo Domingo, San Saturnino, Calceteros y Mercaderes, critican. A su juicio, "debería haberse elegido otra ubicación más apropiada para tal evento", en escenarios más amplios, quizá, "como la Plaza del Castillo". En cualquier caso, reiteran que "se debería haber estudiado cómo hacer compatible la celebración del evento con el normal funcionamiento de la actividad comercial".

Carlos Albillo, director de la asociación, afirmó que se enteró "casualmente" del bloqueo de acceso a la Plaza Consistorial. Le informó de ello la Dra. Laura Maeztu, farmacéutica que tiene su establecimiento en esa localización. "Se lo dijo una compañera de otro comercio cercano", afirmó, mientras se quejaba de que "no hemos tenido ningún aviso directo del Ayuntamiento a la asociación ni a los establecimientos asociados afectados".

"Nos hemos encontrado que, desde las diez de la mañana, se han puesto a desplegar las sillas y, a las once, han empezado a prohibir el paso a la gente, así que no hemos hecho nada en toda la mañana", declaró la farmacéutica.

Rubén Encinas, de Calzados Samoa, manifestó su descenso de ventas de ayer y expresó lo extraño que le parecía que no les hubiesen avisado. "El seis de julio, cuando hicieron el No Chupinazo, sí que nos avisaron", expuso.

Los codirectores del Flamenco On Fire, Juan Casero y Arturo Fernández, lamentaron las molestias ocasionadas por el concierto, que siguió un protocolo estricto para "garantizar la seguridad" de todo el mundo. Al ser la primera jornada del FOF en Pamplona, "desde el festival esperamos minimizar las molestias e ir corrigiendo día a día", aseguró Casero, mientras que su compañero Fernández, avanzó cambios que se aplicarán, en principio, desde hoy: "Mañana -por hoy- se van a habilitar dos dispositivos para que la gente pueda circular. Hoy hemos empezado con un cumplimiento más estricto, con la idea precisamente de coordinarnos con el Ayuntamiento y con el área de Seguridad Ciudadana para que esto cause las menores molestias posibles". Desde este medio se intentó contactar ayer con el Ayuntamiento sin recibir respuesta alguna al respecto.