o primero que se nos viene a la mente cuando escuchamos la palabra Google es el buscador, para otros quizás su servicio de correo, Gmail; y puede que hasta incluso algunos puedan responder a la pregunta de cuál es el fabricante del sistema operativo más usado del mundo, diciendo que Google es el fabricante de Android. Pero la verdad es que todas estas marcas se encuentran dentro de Alphabet la tercera compañía más valiosa del mundo , con más de 850.000 millones de dólares de capitalización bursátil. Detrás hay un entramado de empresas tecnológicas de todo tipo, servicios en la nube, los ordenadores portátiles Chromebook, vehículos autónomos Waymo, Nest y sus aplicaciones domóticas, los smartphone Pixel, compañías de servicios de big data e inteligencia artificial, las descargas de pago en PlayStore... La lista es enorme, pero al final, todos estos nombres que hemos dado ocupan tan solo el 5% de sus ingresos y es que el 95% restante lo ocupan su plataforma de anuncios AdWords y AdSense.

Su lista de gastos en ese 5% es tan grande que se comen casi todo el presupuesto anual. Quizás no conozcas esta cifra pero cada trimestre Apple recibe 6.400 millones de dólares para que su buscador sea el predeterminado en los iPhone. Y es que lo importante es poder seguir controlando por dónde navegamos, qué páginas visitamos, cuánto tiempo pasamos en ellas y con qué frecuencia hacemos compras en ellas. Todos estos datos permiten a Google ser la agencia de publicidad mundial más grande, pero si ha llegado a estas cifras es porque sus anuncios funcionan. Lo primero es que son casi invisibles, no molestan, casi ni puedes distinguirlos de la información natural. En segundo lugar, su grado de acierto en cuanto a perfil del consumidor es excelente. Es muy extraño que a una mujer le aparezca publicidad de un artículo masculino o que nos aparezca publicidad de algo en lo que no hayamos pensado previamente. No, no hacen magia. He oído muchas veces decir que el otro día estuve hablando con unos amigos de comprar una batidora y ese mismo día me apareció un anuncio de Google. Seguramente no te has dado cuenta, pero antes de esa conversación visitaste páginas de batidoras. Eso es lo maravilloso y a la vez lo terrible de Google: todo lo que es capaz de saber sobre nosotros. Recuerda que no están haciendo nada ilegal. Por ejemplo, cuando instalas tu teléfono con Android en un paso te preguntan si has leído y aceptas la política de Google. Aceptar seguro que lo aceptas pero lo de leer, lo dudo mucho porque en un apartado te dicen que usarán todos tus datos de navegación para poderte hacer las mejores ofertas de publicidad.

Puede que saber que los anuncios de Google funcionan y que se suelen convertir en ventas, te esté animando a hacer una campaña de publicidad para tu negocio pero ten mucho cuidado. Entrar en la plataforma de anuncios es muy fácil, puede que incluso hayas recibido un correo donde te regalan 100 euros para tu primera campaña de publicidad. Hacer anuncios que funcionen es mucho más que todo eso. Requiere pensar en un presupuesto anual, no sirve una campaña de quince días o de un mes o un trimestre. Hay que estar analizando los datos y estadísticas diariamente, vivir encima de tu web con mejoras y cambios constantes, piensa que tu página se puede ver las 24 horas del día y desde cualquier país del mundo. No conozco tampoco demasiadas agencias que sepan hacer buenas campañas de anuncios de Google, pero las hay y creo que en esta cuestión deberías dejar todo en sus manos.

@juandelaherran