El artista y arquitecto navarro Carmelo Astrain Ulibarrena se planteó el año pasado un reto: hacer un dibujo al día y componer un diario visual de 2023. Un recorrido por sus propias experiencias personales y vitales en ese tiempo, que se muestra ahora en la sala del Polvorín de la Ciudadela, evocándonos lo que supuso el año ya cerrado.

Diario de un año en dibujos

“Ha sido un trabajo exigente en el que ha salido todo: mis vivencias, mis influencias, mis obsesiones... Es como la vida misma. Las preguntas de siempre, mis respuestas momentáneas, y siempre bajo un punto de vista crítico y personal”, comentaba ayer el artista en la presentación de la muestra, titulada 365 días. El proyecto ha llevado a Carmelo Astrain a investigar con técnicas muy diversas: “Hay aguadas en tinta china, grafito, lápiz, carboncillo, tinta, tinta de color, bolígrafo bic..., hasta esmaltes. Es una investigación propia en busca de la belleza”, dice este creador y arquitecto que reconoce en estas obras la influencia del fotógrafo William Klein, y de dos artistas plásticos: Goya y sus Desastres de la Guerra y sus Caprichos, y el dibujante El Roto. “Son dos genios, ambos han dibujado su entorno y sus sentimientos con sus críticas, y siempre han acompañado sus obras con algo escrito. Y eso es lo que he hecho yo también”, explica Astrain sobre estos dibujos junto a los que lucen comentarios, algunos “tomados literalmente de El Roto”, otros del cantante y poeta estadounidense Jim Morrison, de la cantante argentina Mercedes Sosa, y otros de su propia cosecha. También le han influido acontecimientos que fueron noticia en 2023, como obituarios, aniversarios, sucesos políticos o deportivos, siempre tamizados aquí bajo el criterio y las críticas del artista; los viajes que Astrain hizo el año pasado: en abril fue en bici de Barcelona a Roma y en julio visitó en familia Sicilia, experiencias de las que “han salido muchos dibujos”; y, sobre todo, le ha inspirado su hijo, Fermín, bailarín en el Real Conservatorio Profesional de Danza Mariemma de Madrid.

Diario de un año en dibujos

Son obras con mucho detalle, que invitan a observar sin prisa, y que ponen en valor el trabajo artesanal. “Quería que esta exposición fuese también un reflejo del bombardeo de imágenes al que estamos sometidos hoy; es eso pero de otra manera. Hay una intención de parar el tiempo, de capturar un recuerdo de algo que te ha impresionado, esa necesidad propia de los selfies... pero yo lo llevo a mi campo y lo hago más mío cuando lo dibujo y lo interpreto; no es una foto, es una interpretación. A mí me transmite más de esta manera”, asegura el autor, muy contento de mostrar este diario personal porque tiene claro que “si no enseñas el arte que creas, es como si no tuviera sentido”.

Según Carmelo Astrain, “los temas que tenemos en mente los artistas son los mismos que tiene la gente que no sabe dibujar, así que el público va a verse reflejado en estas obras” en las que están sus “neuras u obsesiones”. Sus temas recurrentes: las caras, las manos y el cuerpo humano. “Me interesa mucho la figura humana con su alma y su anatomía. Las expresiones de la cara y también de las manos, su movimiento y su postura; hay mucha expresividad en las manos, solo que hemos perdido la capacidad de descodificarla, pero en las pinturas clásicas hay mucha intención de expresar a través de las manos”, dice.

Con gran predominio del blanco y negro, aunque en algunos hay color, los dibujos de 365 días tienen mucho que ver con la intuición y el momento en que se crean. “No hay nada premeditado, esto no es una obra sesuda, no, no, esto es tirarte al abismo y a ver qué pasa”. Y hay días, reconoce el artista, “en que nada especial te llama la atención y entonces pruebas cosas nuevas, como a dibujar con la mano izquierda”.

Después del “gran banquete” que se pegó el año pasado dibujando, Carmelo Astrain reconoce que desde el 31 de diciembre no ha tocado ni un bolígrafo. “Nada. Estoy inmerso en mi profesión, la arquitectura. Aunque el dibujo y la pintura es lo que más quiero y lo que más me atrae, ahora necesito descansar de ello”, afirma. l