Poner en valor el patrimonio de Malerreka, sus montes, prados y ríos, su fauna y flora, su mitología, sus oficios y tradiciones; y, al mismo tiempo, invitar a recorrer de una manera sostenible esta zona del norte de Navarra para colaborar en la labor necesaria de concienciar sobre lo importante que es la preservación de lo que tenemos, es el objetivo del cuento ilustrado transmedia El último eguzkilore.

Un proyecto impulsado en 2019 por el programa Innova de Fundación la Caixa y Fundación Caja Navarra y que ve ahora la luz.

Formato físico y digital

Creado por la ilustradora navarra Bárbara Gragirena y el compositor musical Iñigo Legasa, El último eguzkilore puede disfrutarse tanto en formato físico en papel como en digital, con las ilustraciones animadas acompañadas por música original, a través de la web www.elultimoeguzkilore.com.

Hay dos versiones de la historia, en castellano y euskera, en el dialecto o euskalki propio del valle de Malerreka.

El cuento, que incluye un glosario de términos y un mapa con la ruta que propone recorrer por Malerreka, ya está en bibliotecas de la Comarca de Pamplona y próximamente también estará en las de Elizondo y Doneztebe/Santesteban. En librerías locales se venderá al precio de 30 euros.

Iruzki en busca de la luz

Iruzki, la protagonista de esta historia, ha perdido la luz de su medallón, que protege de los malos espíritus. Y pide consejo a las ancianas del pueblo de Ituren, que le recomiendan que dé la vuelta al valle antes de la salida de los joaldunak. Si lo consigue, podrá recuperar la luz de su medallón.

En su ruta, Iruzki se enfrentará a peligros y aventuras, se encontrará con personajes de la mitología como las lamias, quienes le guiarán por los ríos; conocerá a las ranas bermejas, una especie de la zona que habita en los embalses de Leurtza y que está en peligro de extinción, así como a una pastora llamada Ilargi, que habita los hermosos prados del valle que Iruzki recorre, y, con ella, el público lector-espectador y oyente de la música que enriquece la historia.

“Nos gustaría convertir este cuento en serie de dibujos o saga literaria, queda mucho por contar”

Bárbara Gragirena Ros - Ilustradora y creadora de 'El último eguzkilore'

“La ruta empieza y acaba en Ituren, y nos habría encantado que todos los pueblos aparecieran en el libro, pero no cabían, así que seleccionamos varios: Beintza-Labaien, Zubieta, Ituren, Elgorriaga y Ezkurra”, ha comentado este viernes por la mañana Bárbara Gragirena en la presentación del proyecto que ha tenido lugar en Civican.

El último eguzkilore es el particular homenaje que la ilustradora navarra rinde a sus abuelos, nacidos en Urroz y afincados en Doneztebe. “Quería poner en valor lo que ellos han vivido y compartido siempre”, dice Gragirena, profesional del sector de la animación que hasta ahora ha trabajado para largometrajes animados.

“El impulso que ha dado Innova a este proyecto transmedia ha sido una suerte para mí, porque me apetecía tener tiempo para dejar de mirar fuera y mirar lo que tenemos a nivel local, y recoger el patrimonio inmaterial de nuestra tierra”. En concreto, de este valle del norte de Navarra donde han crecido sus abuelos.

Las riquezas del territorio

“Ha sido un proyecto coordinado con los agentes del territorio. Me entrevisté con la asociación Baztan-Bidasoa, Cederna Garalur, la Mancomunidad de Malerreka y Uraren Bailarrak, para que me comentasen las necesidades que tenían y las dificultades que veían en el territorio. De cada uno fui extrayendo unas cosas y también conté con otras colaboraciones a la hora de plantear una ruta sostenible. De Uraren Bailarrak extraje que el valle está articulado en torno a los ríos, entonces todo el recorrido se hace por el agua. Y la Mancomunidad me comentó que es una zona muy envejecida, y por ello gran parte de los personajes son abuelitas, para poner en valor la sabiduría de las personas mayores, que a veces se nos olvida”, subraya Bárbara Gragirena.

El último eguzkilore ensalza el patrimonio, tanto paisajístico y natural como cultural, así como las tradiciones y la mitología de la zona. Los joaldunak de Ituren y Zubieta, fauna y flora locales, mitos y leyendas de las lamias, vestuario tradicional de Euskal Herria, y escenarios como el Molino de Ezkurra, el monte Mendaur, los embalses de Leurtza, un castañar centenario de Beintza-Labaien o el lavadero de Ezkurra, inmortalizados en bellas ilustraciones, se recogen y ponen en valor en este proyecto transmedia con vocación de convertirse en una saga de libros o serie de dibujos animados.

"A cada personaje he asignado un leit motiv, una armonía, un modo y unos instrumentos; ha sido un trabajo de adecuar la música a las ilustraciones, a los cambios de color y atmósfera"

Iñigo Legasa - Compositor musical del proyecto 'El último eguzkilore'

“Nos gustaría continuar y ampliar el proyecto en otros formatos, porque queda mucho por contar. De momento han seleccionado el proyecto en el catálogo del Weird Market de Valencia, y estamos trabajando para transformar este libro en un mapa de tramas que pueda funcionar para hacer una serie de dibujos”, afirma la ilustradora del cuento, con el que desea contribuir a que “cuando la gente recorra el valle se dé cuenta de lo importante que es la preservación de todo lo que ya tenemos”.

Música original

La ruta que proponen recorrer es “una manera sostenible de conocer la zona” y de visitar todos los enclaves que lucen en el cuento ilustrado.

Una historia que se enriquece con la música creada por Iñigo Legasa, que sumerge al público lector en diferentes atmósferas dependiendo de los momentos de la trama o de los estados de ánimo de los personajes. “A cada uno de ellos asigné una especie de leit motiv, una armonía, una melodía, un modo y unos instrumentos de orquesta”, cuenta. Así, las lamias suenan a arpa, cuerdas y a palo de lluvia. En otros momentos se escucha txalaparta, flauta dulce, trompa, violín –interpretado por Victoria Gragirena–, txistu, o los sonidos de los joaldunak grabados en directo.

"Quería hacer un homenaje a mis abuelos, poner en valor todo lo que ellos han vivido y compartido"

Bárbara Gragirena Ros - Creadora e ilustradora de 'El último eguzkilore'

“Ha sido un trabajo de adecuar las composiciones musicales a las ilustraciones, a los cambios de color y atmósfera, y un intento de meter al espectador en lo que se cuenta y en un ecosistema con unos paisajes como los del valle de Malerreka, que son preciosos. La música te lleva, te va guiando por la historia”, apunta Iñigo Legasa.

Encuentro de artistas

En el marco del proyecto, se celebrará un encuentro para artistas de la animación y videojuegos en la zona de Malerreka, Truxa Muxa, abierto a que otros creadores y creadoras aporten nuevas perspectivas sobre el valle.

Será entre los días 19 y 22 de septiembre, ya se ha inscrito una treintena de artistas y la convocatoria está abierta en Instagram: @truxa.muxa.