La escritora y poeta tafallesa Marina Aoiz acaba de publicar Maresía, un libro que nació de la contemplación y el recogimiento en la isla de Lanzarote. Escrito en un momento de introspección personal, este nuevo trabajo se aleja de su poesía habitual para adentrarse en un género híbrido que mezcla la prosa poética con la reflexión. Lo presentó el pasado 12 de marzo en el Kulturgunea de Tafalla, en una sesión en la que también participaron compañeras de aventuras literarias, como Consuelo Allué e Isabel Logroño; además de la bailarina Suri Belloso, que aportó danza a la poesía.
El año 2023 fue un año de cambios para Marina Aoiz. La pérdida de su padre fue un momento duro, y con la necesidad de encontrarse a sí misma, decidió viajar a Lanzarote, un lugar al que ha estado ligada durante más de tres décadas. "Tenía la necesidad de estar un tiempo para mí y pensé que en Lanzarote, donde siempre voy con otras perspectivas, podría ser el sitio ideal. Pero nunca había escrito allí", recuerda la autora.
Marina partió en septiembre con la única compañía de un cuaderno y un bolígrafo. Sin embargo, fue su teléfono móvil el que acabó convirtiéndose en su herramienta de escritura. "Me apetecía escribir sobre la observación, la contemplación del mar. Yo le llamo la mar, siempre en femenino", explica. Durante tres semanas, fue apuntando pensamientos y descripciones en las notas de su móvil, sin pretensiones, dejándose llevar por el momento y la experiencia sensorial del entorno.
A su regreso a Tafalla, al revisar lo escrito, sintió que había algo especial en aquellas notas. "Me gustaban, así que decidí completar lo que había escrito. Esperé un poco y volví a marcharme en noviembre y diciembre. Estuve sola de nuevo y le di forma. Lo mismo, con el móvil". El resultado fue un libro reposado, escrito desde la contemplación y el fluir del pensamiento.
Contemplación y escucha interior
Maresía no es un poemario al uso. Su estructura fragmentaria permite que el lector lo aborde de múltiples maneras. "Un amigo que leyó la primera parte decía que era un libro zen", comenta. "No eres la misma en Tafalla que en la isla. No eres la misma en distintos momentos de tu vida. Y eso se refleja en el libro".
El libro ofrece pequeñas descripciones de momentos, de estados de ánimo, de recuerdos, siempre en diálogo con el paisaje. "No necesitas haber leído el principio para entender el final", aclara la autora. Es un libro que se puede leer de corrido o abrirse al azar, encontrando en cada página un pequeño instante de introspección.
La feminidad del mar y la amistad como pilares
Uno de los aspectos más destacados de Maresía es la feminización de la mar. "Para mí, la mar es un útero gigante", explica Marina. En su obra, este espacio acuático no solo es un reflejo de su mundo interior, sino también un símbolo de feminidad y creación. En este sentido, la publicación del libro en el marco del 8M no es casualidad.
"Durante muchos años he colaborado con el área de Igualdad coordinando talleres literarios, cursos de lectura y escritura, y visibilizando a mujeres escritoras y artistas", señala. Pero más allá de su propia trayectoria, el libro en sí ensalza la amistad entre mujeres. "En Lanzarote siempre me he sentido muy acogida por grandes amistades. Esas amigas me han enriquecido a lo largo de los años. Hemos vivido juntas maternidades, separaciones... Hay una historia de amistad potente detrás de todo esto".
Aunque Maresía tiene una marcada perspectiva femenina, no es un libro exclusivamente para mujeres. "Da igual quién lo lea. Hay feminismo y feminidad en sus páginas, pero lo puede leer cualquiera", afirma con seguridad.
Una autoedición
Marina decidió autoeditar ella misma su último trabajo, cuidando cada aspecto de la edición, desde la maquetación hasta el diseño de la cubierta. "Tiene una textura especial, no quería nada plastificado", comenta. Además, las ilustraciones del libro han sido realizadas por una amiga con la que ya ha colaborado en tres ocasiones anteriores. "Quería hacerlo así, a mi manera", asegura.
El libro tiene un precio de 15 euros y estará disponible en librerías como Idazti y Folder, en Tafalla. También se podrá conseguir directamente a través de la autora, escribiéndole a su correo electrónico.
Un libro que celebra la vida
"Este año cumplo 70 años y me pareció una buena manera de celebrarlo", confiesa. "El libro celebra la vida, la posibilidad de cambiar, de viajar, de conocer a otras personas, de nadar en la mar violenta. Celebra la amistad, los encuentros y los reencuentros". Pese a la alegría que le produce esta publicación, Aoiz reconoce que siempre le ha dado cierto pudor lanzar un nuevo libro. "Es como si te desnudaras", dice. Pero con los años, ha aprendido a enfrentarse a ello con otra mirada: "Con 70 años, ya tengo menos pudor".
Por otro lado, la escritura sigue formando parte de la vida de Marina Aoiz. "Acabo de escribir un libro que no sé qué destino tendrá. Es sobre el genocidio y los campos de exterminio", adelanta. "Es un libro muy duro, la antítesis de Maresía".
El interés por este tema surgió cuando se conmemoró el 80 aniversario de la liberación de Auschwitz. "Sentí la necesidad de leer sobre ello. Leí a Viktor Frankl, a Primo Levi… Autores que tuvieron una experiencia directa del horror. Y cuando leo mucho sobre algo, necesito volcar esas emociones en la escritura". Ahora, sigue profundizando en el tema con lecturas de Hannah Arendt y otros pensadores que han reflexionado sobre el mal y la memoria histórica. "Es un tema que siempre está ahí y que despierta mucho interés", concluye.
Mientras tanto, Maresía sigue su propio camino. Un libro que nació sin planes concretos, pero que, al igual que el mar, encontró su propia forma de existir.