LaLiga vive este jueves uno de los momentos más delicados de su reciente historia, con una Asamblea General Extraordinaria en la que los clubes deberán decidir la aprobación o no de un acuerdo con CVC Capital Partners que inyectaría unos 2.700 millones de euros en la competición, pero que desde su anuncio cuenta con la firme oposición de dos grandes como Real Madrid y Barcelona. Osasuna podría ingresar cerca de 50 millones si se confirma el acuerdo.

Este acuerdo, ratificado hace una semana por la Comisión Delegada de LaLiga, a juicio del organismo que reúne a los clubes profesionales del fútbol español supone "un ambicioso plan de inversión" de 2.700 millones de euros (a cambio del 10,95% de sus derechos audiovisuales durante 50 años) que "permitirá dotar a LaLiga y los clubes de recursos con el objetivo de continuar fortaleciendo la competición y transformando la experiencia de los aficionados".

"El dinero que aportará CVC se concentrará directamente en un 90% en los clubes, incluyendo también fútbol femenino, fútbol semiprofesional y no profesional de la mano de la Federación Española y en el CSD. Se trata, por tanto, de un acuerdo integrador, equitativo y democrático, que no solo blinda la viabilidad económica de todos los clubes del fútbol español, sino que les abre un nuevo presente y futuro al permitirles avanzar en su desarrollo y transformación una década", explicó LaLiga.

Tanto Real Madrid como Barcelona mostraron su total oposición a un acuerdo con CVC que, a su juicio, no es congruente con los años de duración e hipotecaría la economía de los clubes por un largo periodo, en particular los relativos a los derechos audiovisuales.

"Este mismo fondo oportunista es el que intentó sin éxito acuerdos similares con las ligas italiana y alemana. El Real Madrid no puede apoyar una operación que regala a unos inversores el futuro de 42 clubes de Primera y Segunda División y el futuro de los clubes que se clasificaran durante estos 50 años", afirmó el club en un comunicado.

La entidad que preside Florentino Pérez ha llevado más allá su negativa al acuerdo, y anunció que emprenderá acciones legales contra Javier Tebas, presidente de LaLiga; contra Javier de Jaime, responsable del Fondo CVC; y contra el propio Fondo CVC.

Por otro lado, una gran parte del resto de los 42 clubes han mostrado su apoyo a la aprobación de la denominada Liga Impulso, pues la ven como una forma de sanear su economía, duramente castigada por la pandemia, y de poder inscribir a jugadores para el nuevo curso.

La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) también manifestó en un comunicado su oposición. El organismo que preside Luis Rubiales tildó el acuerdo como "totalmente ilegal" y cargó contra Tebas, del que asegura que su objetivo es convertirse en presidente de la sociedad LaLiga Impulse para "percibir nuevos emolumentos y eludir los ya de por si pocos controles que ahora se le imponen".

24.250 millones: SITÚAN EN ESA CIFRA EL BENEFICIO

Un informe de la empresa de servicios financieros Rothschild & Co cifra en 24.250 millones de euros la valoración de LaLiga Impulsoque, a cambio de inyectar 2.700 millones de euros, da al fondo CVC una participación de alrededor del 10% del capital de LaLiga. El informe concluye que la operación, que establece un múltiplo de Ebitda de 15,1 es "justa desde un punto de vista financiero" y "alineada con la media de las operaciones del mercado". Para el análisis se han tenido en cuenta los habituales modelos de valoración, como el descuento de flujo de caja, comparativa del mercado y análisis de transacciones semejantes.