- El entrenador mexicano Javier Aguirre afirmó ayer en su presentación como nuevo técnico del Mallorca en sustitución de Luis García Plaza, despedido este martes, que a su equipo le esperan “nueve finales a tumba abierta” en los partidos que faltan para que acabe la Liga.

“Estoy muy contento de estar aquí y de regresar a la mejor Liga del mundo. Todo en el Mallorca me ha causado buena impresión, la grada, el ambiente; desde dentro te das cuenta que hay material para trabajar por la Primera”, dijo Aguirre, que se presentó ante los medios de comunicación acompañado del CEO de Negocios del club balear, Alfonso Díaz, y el director de fútbol, Pablo Ortells.

El Mallorca es antepenúltimo en LaLiga con 26 puntos, a 1 de la salvación, y arrastra una racha de seis derrotas consecutivas. El extécnico de Osasuna, de 63 años, ha firmado un contrato que expira el 30 de junio, aunque es prorrogable hasta el próximo año si consigue que el Mallorca mantenga la categoría.

“Necesito saber como esta aninómetro porque estar en descenso es una situación muy incómoda” dijo Aguirre en alusión a la plantilla que dirigirá a partir de ahora. “He visto al Mallorca desde afuera. No quiero hablar de lo que se hizo en el pasado por respeto a mi colega (García Plaza). Tenemos que sacar esto en un tiempo extra porque estamos en zona comprometida. Es difícil hacer un diagnóstico (del equipo) porque influyen muchas circunstancias en el resultado final. Quiero ver cómo están los jugadores (esta misma tarde dirigía su primer entrenamiento). Sé que tenemos lesionados y dos suspendidos; ante el Getafe tenemos que hacer un partido competitivo”, aseguró. ”La experiencia me dice que no puedes ver todo negro. A los jugadores les diré la verdad y desde el corazón. Nos queda una Liga de 27 puntos y he visto que hay capacidad de mejora”, señaló.