Pamplona - El entrenador de Osasuna, Jagoba Arrasate, compareció ayer en la sala de prensa de Tajonar para hablar del próximo partido de su equipo, el que mañana a partir de las 18.00 horas le enfrentará al Rayo Majadahonda en El Sadar. Será en casa, donde los rojillos no conocen la derrota en Liga en lo que va de curso y donde además han solventado con victoria sus últimos diez compromisos, el escenario donde el líder de Segunda volverá a defender tal condición y la ventaja de siete puntos con respecto al tercer clasificado -los dos primeros ascienden directamente-, aunque el técnico puso el foco en otros asuntos. El principal, sumar tres puntos más.
“Aquí no hay ninguna jornada en la que puedas hacer cábalas. Hay que estar en una situación de alerta continua y nosotros ahora no tenemos por qué mirar atrás; si hacemos nuestro camino, nos irá bien, y tenemos que seguir así”, explicó el preparador vizcaíno, que valoró positivamente la victoria de su equipo en Málaga ante un rival directo: “En el descanso del partido del lunes teníamos al Málaga a un punto, y al final se quedó a siete. Dimos un paso importante, pero tenemos que seguir ganando, aunque está claro que el equipo está tranquilo y contento después de la remontada”.
Aunque cauteloso, como se ha mostrado durante toda la temporada, Arrasate también ofreció su versión más ambiciosa: “Lo primero que nos planteamos ahora es llegar a los 60 puntos. Tenemos 57, que está muy bien, pero queremos poner ya el seis por delante. Si conseguimos llegar a 60, daríamos un paso más. Ahora ya es una cuenta atrás y cada partido que ganemos es un paso más, quitar una hoja al calendario, y a ver si quitamos la primera el domingo (por mañana)”.
No obstante, el entrenador de Osasuna avisó de que no será fácil superar al Rayo Majadahonda, “un equipo que no llama mucho la atención, pero que tiene 33 puntos y que sabemos que es un rival con confianza y que tiene jugadores importantes”. En este sentido, Arrasate destacó que “seguro que nos pone dificultades porque es un gran equipo”. “Viene de ganar al Alcorcón y en su último desplazamiento fue capaz de ganar en Gijón metiendo tres goles. Me parece un equipo muy peligroso y tendremos que estar bien para conseguir otra victoria en casa”, añadió el técnico, que alertó de las virtudes de su adversario de mañana: “Es un equipo que juega muy bien al fútbol, que toma riesgos, que tiene un juego combinativo y asociativo que te atrae, pero luego te hace daño a la espalda. Tienen muchos registros. Te hacen daño en las transiciones y nos lo demostraron en el partido de la primera vuelta, un encuentro que nosotros jugamos bien pese a no ganar”.
Para terminar, Arrasate también quiso recalcar que “el equipo es consciente de lo que nos estamos jugando y de lo que nos está costando ganar cada partido”. “Estamos en una gran dinámica, pero sólo en Gijón ganamos por dos goles, lo demás han sido victorias por la mínima e incluso remontando, y eso genera un desgaste físico e incluso mental que hace que la gente sea consciente de que hay que hacer las cosas bien para tener opciones de ganar, y aún así no es fácil”, remató.
“Rober Ibáñez es un chico fantástico”
La aclaración. A Rober Ibáñez se le notó el lunes enfadado por ser sustituido en Málaga y Arrasate aclaró ayer el asunto. “Le he dicho que se tenía que haber hablado de que en el primer tiempo fue el mejor y de que dio una asistencia de gol, pero que él dio pie a que se hablara de que se va cabreado y de que no sale en la foto de celebración, aunque no llegó a tiempo porque estaba saludando. Eso es lo que pasó. Es un chico fantástico que en su momento se cabrea porque quiere jugar más, Oier le calma y yo le hago ver que ha hecho un buen partido, que viene de lesión y que le quiero fresco para el próximo partido. Y lo entiende. Nada más”. - J.L.
