BARCELONA. El Circuito de Barcelona-Cataluña echa el cierre para toda actividad programada para las próximas cuatro semanas, lo que no afecta al Gran Premio de Fórmula Uno (10 de mayo), aunque los organizadores informaron de que mantienen conversaciones con la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) para la reprogramación del calendario.

Después de que el gobierno de España haya declarado el estado de alarma a partir de este sábado por la pandemia del coronavirus, casi la totalidad de los sectores económicos quedarán en suspenso, algo que afecta directamente a la actividad del circuito barcelonés, que cuenta con una agenda cargada.

Las primeras pruebas afectadas por la suspensión son la 'Ultimate Cup' (21 y 22 de marzo), la 'European Le Mans Series' (4 y 5 de abril) y la 'WorldRX of Catalunya-Barcelona' (17, 18 y 19 de abril).

Estas tres últimas quedan pospuestas y se buscarán nuevas fechas a la espera de los que se acuerde con los promotores de las carreras.

Asimismo, el paso de la Volta ciclista a Cataluña por el circuito (28 de marzo) queda aplazado, debido a que la carrera, que celebra el centenario este año, también se ha visto afectada por la suspensión.

El alquiler del Circuito de Barcelona queda suspendido hasta, como mínimo, el 5 de abril, igual que las actividades programadas, hasta la misma fecha, informaron los gestores del recinto.

Además de los contactos que el Circuit0 de Barcelona ha reconocido con los organizadores del Gran Premio de Fórmula Uno, los responsables de Montmeló también subrayan que la prueba de MotoGP programada para el 7 de junio no se ve afectada por las medidas actuales.

Este viernes el presidente de la fórmula uno, el estadounidense Chase Carey, anunció que el Gran Premio previsto para el próximo 22 de marzo en Baréin y el que debía disputarse en Vietnam el 3 de abril han sido pospuestos debido a la pandemia mundial del coronavirus, apenas un días después de que se cancelase el de Australia por el mismo motivo.