- La Vuelta a Burgos, que se disputará del 28 de julio al 1 de agosto, permitirá un acceso controlado del público tanto en salidas como llegadas de la carrera, según ha informado la organización. Desde la organización se ha establecido un protocolo de seguridad de obligado cumplimiento por los distintos grupos de la prueba. En el caso de los corredores, deberán mantener la burbuja protectora en el hotel y respetar los horarios de toma de temperatura y uso de mascarillas en el control de firmas. Además, deberán evitar el contacto con el público y corredores de otros equipos, así como respetar las filas de salida de cinco corredores o mantener la burbuja del pelotón.