Cementos Portland ha tenido que readmitir a cinco afiliados a ELA despedidos en 2013
Una sentencia firme prueba que hubo “discriminación sindical” en las extinciones
pamplona - Cementos Portland ha tenido que readmitir a cinco trabajadores, afiliados a ELA, que fueron despedidos por un ERE en 2013, tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra, que ya es firme porque la cementera no va a recurrir tras agotarse los plazos.
Sonia Ontoria, abogada de los servicios jurídicos de ELA, indicó que este dictamen desvela que “Portland no despidió por causas económicas sino porque quería eliminar de la plantilla de Olazti a los afiliados a ELA”. Y es que la sentencia ratifica lo que dictaminó el Juzgado de lo Social: que las extinciones de contrato prueban “una discriminación sindical, ya que seis de los nueve empleados pertenecían a ELA”. Cinco de ellos han regresado, y el sexto se desvinculó tras “vivir un despido traumático”.
La sentencia del TSJN indica que “la proporción de afiliados de ELA que han resultado afectados por el ERE es singularmente alta, y excede también de forma sensible la propia proporción de afiliados del sindicato sobre el total de la plantilla. Además, algunos de los puestos ocupados por estos trabajadores debían amortizarse pero no fueron efectivamente amortizados y tampoco se justificó la aplicación concreta de criterios para la reubicación de otros que vinieron, finalmente, a suplir los puestos antes ocupados por trabajadores afiliados que fueron despedidos”. El próximo lunes se concretará la compensación que se tiene que aplicar entre los salarios que deben percibir los trabajadores readmitidos y la indemnización y prestación por desempleo que tienen que devolver.
El delegado de ELA en Cementos Portland Rubén García remarcó que “los despidos fueron una persecución clara hacia la acción sindical de ELA”. Pero dijo que “la estrategia de la empresa no ha funcionado” ya que en las últimas elecciones, sumaron cuatro delegados (“uno más” y por un voto no lograron “el quinto en oficinas”). Por su parte, el coordinador de ELA, Mitxel Lakuntza, destacó que “a estos trabajadores se les despidió por ejercer de forma honrada su labor sindical” y resaltó que actuaciones así suponen “un desprestigio para la imagen de la empresa” y que “en vez de ahorrar, incrementan costes”. ELA “da la cara y vive de las cuotas, no como los que defienden a empresas y gobiernos, que son corruptos y viven de las subvenciones”. Por último, pidió que se aclare “el sueldo de Javier Lecumberri por la acumulación del crédito horario. Hemos pedido la información y la empresa no la da”.