irurtzun - Siete años después del cierre de Inasa, la actividad económica ha vuelto al antiguo recinto de esta empresa emblemática de Irurtzun, la primera actuación de regeneración industrial acometida en Navarra. Y es que el Ejecutivo foral ha invertido más de siete millones de euros en este proyecto, 2,5 millones en la adquisición de suelo y casi cinco millones de euros en su reurbanización; una inversión que el Gobierno de Navarra ya ha visto compensada con la venta o alquiler de parcelas a siete empresas que dan empleo a 240 personas. Con una superficie total de 140.000 metros cuadrados de superficie, el polígono cuenta con un grado de ocupación de cerca del 80%.

“En una visita en octubre de 2016, cuando el Gobierno trasladó el compromiso de adquirir las parcelas de la antigua Inasa, paseábamos por la calle principal, estrecha y con instalaciones antiguas. Ahora es una calle ancha, con naves más modernas y sobre todo, con actividad económica. En aquella ocasión no había movimiento”, recordó ayer Manu Ayerdi, vicepresidente de Desarrollo Económico del Gobierno de Navarra. En la nueva visita estuvo acompañado por los alcaldes de Irurtzun y Arakil, Aitor Larraza y Javier Huarte respectivamente; el director gerente de Nasuvinsa, José Mari Aierdi; la directora general de Sodena, Pilar Irigoien; y la directora gerente del Servicio Navarro de Empleo-Nafar Sarea, Paz Fernández; así como representantes de las empresas implantadas, de los ayuntamientos de la zona, de la Mancomunidad de Sakana y la Agencia de Desarrollo.

La primera parada fue en Puertas Dile, empresa de Irun ya instalada en Irurtzun. Asimismo, Sapa, que necesitaba más espacio para crecer, ocupa otra parcela. Por otro lado, Saprem y Manfisa están ultimando la ampliación de sus plantas en este polígono y Embalajes Bretón está construyendo su nueva nave. Además, Transportes Plazaola y Construcciones Apezetxea han comprometido ya su nueva implantación. Las siete empresas generan en total 140 millones de facturación anual.

PROYECTO PIONERO Ayerdi destacó el proyecto de Irurtzun “como una actuación paradigmática para recuperar nuestro patrimonio industrial, regenerarlo y transformarlo en un activo de futuro para reactivar la actividad económica y generar empleo estable y consolidado en comarcas como ésta, que han sido especialmente castigadas por la crisis, pero que ahora son nuestros puntales de la recuperación industrial”. Al respecto, el vicepresidente incidió en que el sector público y su Gobierno “han apostado por acompañar a las empresas en su reactivación, animar, facilitar y allanar en todo los posible su implantación y contribuyan a que estos polígonos emergentes se conviertan en palanca de desarrollo socioeconómico para toda la comarca”.

Las actuaciones ejecutadas por Nasuvinsa han incluido la reordenación urbanística para la comercialización de suelo y naves industriales que permitiesen la compensación económica de la inversión, derribos parciales de las anteriores instalaciones de Inasa con el mayor aprovechamiento posible de las estructuras e infraestructuras existentes, la regeneración de la distribución energética y otros servicios, así como la estructuración viaria del polígono. También la descontaminación de suelos provenientes de la antigua actividad, para lo cual se han destinado 600.000 euros, según explicó Aierdi, director gerente de esta sociedad pública.

En relación a los precios, recordó que el metro cuadrado de suelo de parcela es de 60 euros y en el caso de que esté construida son 210 euros. Por otro lado, adelantó que se está analizando la ubicación del guarderío forestal en el polígono, bien a la entrada del edificio o en una plataforma superior, el antiguo aparcamiento, que queda por urbanizar.

La nueva área industrial de Irur-tzun, con 95.000 metros cuadrados en su término municipal y 45.000 metros cuadrados en Arakil, cuenta con 110.000 metros destinados a parcelas industriales, mientras que el resto corresponde a zonas verdes, servicios o viales. Quedan pendientes de ejecutar 1,4 millones de euros previstos para las últimas labores de adecuación del área industrial.

VIVERO DE EMPRESAS Las antiguas oficinas de Inasa, propiedad del Ayuntamiento de Irurtzun en pago del 10% de los aprovechamientos urbanísticos, albergarán un polo de innovación digital y vivero de empresas, proyecto a realizar entre el Ayuntamiento de Irurtzun y Nasuvinsa, en un principio en la planta primera. Las obras en el ala derecha, a cargo de este consistorio, han comenzado esta semana. “La Agencia de Desarrollo de Sakana está realizando un estudio de las necesidades formativas de digitalización que puedan tener para llevarlas a cabo en la primera planta del edificio”, adelantó el alcalde de Irurtzun. “En función de la actividad que se genere se podría ampliar a las otras plantas”.