UGT y CCOO, en sintonía con VW para firmar el pacto del 3º modelo

El presidente del comité, Alfredo Morales (UGT), señaló que el documento “va en la línea” de lo planteado por el sindicato: un acuerdo marco que “englobe el cumplimiento del programa de 2019, la modificación sustancial de las condiciones de trabajo por las vacaciones de verano y las medidas para optar al tercer modelo”. En los mismo términos se expresó Eugenio Duque, de CCOO, que añadía que había que concretar materias antes de firmar. Ambos sindicatos han convocado asambleas por separado con sus afiliados para informar sobre este borrador el lunes 1 de julio.

El resto de centrales con representación en el comité se mostraron más prudentes en sus declaraciones, aunque consideraban que era positivo para la planta fabricar otro modelo, además del Polo y del T-Cross.

Igor Peñalver (ELA) dijo que “había que estudiar el documento”, aunque su sindicato creía “positivo” que la dirección “se comprometa a invertir en la modificación de algunas instalaciones que están obsoletas o dan problemas”. Raúl Portillo (LAB) consideró el borrador “una declaración de intenciones sin datos concretos”. Óscar Añorbe (CGT) reconoció que “no esperaba encontrarse propuestas específicas” y adelantó que hoy celebrarán asambleas con sus afiliados. Por último, Iñaki Coscolín (CCP) manifestó que “todavía había que analizar la documentación entregada”.

En cambio, los seis sindicatos señalaron que la empresa debe detallar la inversión que supondría la llegada de este tercer modelo y el número de empleos fijos.

diez coches más al día Una de las exigencias de VW para adjudicar el tercer modelo consiste en incrementar la producción diaria en la fábrica en 30 coches, de 1.408 a 1.438. Esta fue la única cifra que incluyó ayer la dirección en el borrador. La empresa especificó que este aumento se introduciría en el momento en el que la multinacional anuncie la asignación del tercer modelo, que si ocurre, la confirmación sería este mes. VW explicó que esta medida se aplicaría en dos fases: tras la adjudicación del tercer modelo, incrementaría la producción en cinco coches por turno (15 diarios); y a partir del lunes 4 de noviembre se añadirían los otros 5 por turno (otros 15) para hacer el total de 30 vehículos diarios más. Para afrontar este aumento se requiere de inversión para ejecutar las medidas técnicas que se acuerde con la parte social, como bandas de acompañamiento en el taller de montaje, ampliación de la línea de puertas en el taller de motores, etc.

La dirección descarta que este crecimiento de producción se realice con un aumento del nivel de actividad de la plantilla. Se hará con más carga de trabajo y más personal. VW también remarca en el documento que “deben cumplirse los objetivos de productividad previstos para lograr el tercer modelo”. El borrador dedica un apartado al lanzamiento y remarca que “se acordarán todas las medidas necesarias para cumplir con su preparación -sin especificarles-” y otro habla de la estructura y flexibilidad, en el que se indica que “si los volúmenes productivos lo requieren, ambas partes estudiarán las medidas necesarias para ello”.

“Afianzará la estabilidad de la planta”. En el borrador, la dirección indica que “el tercer modelo afianzará la estabilidad de la planta y del entorno en un momento de mucha volatilidad. Con el tercer modelo tendremos una producción más estable y mayor seguridad en el empleo y en el futuro”.

“Buen posicionamiento para el eléctrico”. El documento insiste en que “el tercer modelo sitúa a VW Navarra como un punto estratégico para la producción de vehículos eléctricos, vinculada a la estrategia del Consorcio VW con la electromovilidad”.

“Aumentar proveedores”. Tras la asignación, se abriría “un diálogo con las administraciones, regional y estatal, para crear espacios de encuentro para analizar el tejido industrial de Navarra, y entre todos, elaborar una propuesta para trasladar a la dirección del Consorcio, consistente en aumentar el número de proveedores en la Comunidad y el empleo”.